El procesado, que se enfrenta a una pena de nueve años de prisión, argumenta haber sufrido agresiones por parte de la víctima
A CORUÑA, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un acusado de intentar matar a otro hombre en julio de 2022 en Outes (A Coruña) ha limitado los hechos a un intento de dar "un susto" a la víctima porque, según expuso en el juicio en la Audiencia de A Coruña, había sufrido agresiones por su parte. Al mismo tiempo, ha alegado que no recuerda "nada" porque estaba "sin medicación".
"Se metía siempre conmigo, toda la vida patadas en el culo, bofetadas e incluso agresión sexual". Así lo ha explicado durante la vista que ha comenzado este martes en la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña -- y continuará el miércoles-- donde el encausado ha manifestado que el día de los hechos estaba "sin medicación" porque se la había retirado su psiquiatra. "No me acuerdo de nada", ha insistido.
El procesado, además, ha señalado que él "nunca atropellaría a nadie". "Yo al accidentado solo le quise dar un susto, no quise atropellarlo para nada, no quería hacerle ningún daño", ha añadido.
A su vez, la víctima ha afirmado haber recibido amenazas por parte del acusado. "Me había amenazado, que me iba a matar a mí, a la mujer y a los hijos", ha asegurado.
En la misma línea, ha comparecido un testigo que ha expuesto que el encausado le dijo "dos o tres veces por lo menos que cualquier día le pasaba con el coche por encima -- a la víctima--, pero no solo a él, a algún vecino más".
La Fiscalía califica los hechos como tentativa de homicidio y pide para el acusado nueve años de cárcel. La acusación particular, por su parte, solicita 11 años de prisión. En contraposición, la defensa pide la libre absolución.
HECHOS
Según el escrito de calificación fiscal, sobre las 22,35 horas del 4 de julio de 2022 el acusado se hallaba en su coche en la carretera de la Playa de Broña, en el término municipal de Outes.
En ese momento, explica, vio pasar caminando a la víctima, "un vecino de la localidad con el que mantenía una intensa enemistad desde hacía al menos siete años" con un "profundo resentimiento" por parte del procesado.
Sobre lo sucedido, señala que en ese instante el acusado aprovechó que el hombre se dirigía a arrojar la basura del bar que regenta para "vengarse de él".
"Con este propósito condujo su vehículo en dirección prohibida hasta llegar a la altura de su víctima y arrollarlo de frente y sabiendo que con ello le ocasionaría la muerte o, cuando menos, que ésta sería la consecuencia más probable de su acción", concluye.
