El acusado de matar a los padres de su ex novia prendiendo fuego a su casa dice que no tenía intención de dañar a nadie

Europa Press Nacional
Actualizado: martes, 10 enero 2006 18:59

MADRID, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

Gregorio R.T., al hombre acusado de matar a los padres de su ex pareja al prender fuego a su casa, sita en el distrito de Ciudad Lineal, en abril de 2004, reconoció hoy en el juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Madrid haber provocado el incendio, aunque matizó que la intención del mismo no era dañar a nadie, sino que la mujer le abriera la puerta de la casa.

El Ministerio Público reclama 47 años de prisión para Gregorio R.T. al que imputa dos delitos de asesinato, uno de asesinato en grado de tentativa y un delito de incendio ya que, según el fiscal, sobre las 5.30 horas del 8 de abril de 2004 el acusado compró cuatro litros de gasolina que posteriormente vertió en la puerta de la casa de su ex pareja, Celia A.G., prendiéndola fuego con un mechero "con pleno conocimiento que en el interior de la misma se encontraban los padres de Celia y el hijo de ésta".

Como consecuencia de esta acción, se produjo una fuerte explosión que provocó el incendio de la vivienda, resultando fallecidos los padres de Celia y herido su hijo. Tras cometer el acto, el acusado llamó a la policía y reconoció que él había sido el autor del incendio.

Según explicó en la Sala el procesado, Celia y él habían mantenido una relación sentimental durante siete años, en los que habían convivido como pareja. Aseguró que la mujer tenía la costumbre de "desaparecer" durante varios días sin dar explicaciones, razón por la que discutían a menudo, hasta que en una ocasión la amenazó con darle "dos tortazos y matarla", hecho que motivo que su ex pareja lo denunciara por amenazas.

"NO QUERÍA DAÑAR A NADIE"

El acusado refirió que sobre las 17.00 horas del 7 de abril vio a Celia entrar en su portal, por lo que decidió esperar en las inmediaciones a que saliera y así pedirle explicaciones por su comportamiento. Añadió que de madrugada, al ver que la mujer no abandonaba el inmueble, optó por irse a tomar "unas copas" a dos bares cercanos, en uno de los cuales compró una garrafa que posteriormente llenó con cuatro litros de gasolina.

"Decidí que la puerta de la casa de Celia se tenía que abrir de una santa vez y aparecer tras ella una cara y una explicación. Por eso subí al piso, derramé la gasolina en el felpudo y le prendí fuego con un mechero. Salió un humo muy intenso y una gran llamarada que me quemó la cara; entonces fui a la calle a llamar a la policía y los bomberos. Sólo quería llamar la atención, nunca tuve la intención de matar a nadie", afirmó el procesado, quien puntualizó que a día de hoy no logra "dar con el hilo conductor" que desencadenó el siniestro.

En el acto del juicio oral también declararon en calidad de testigos varios policías municipales que apuntaron que el día de los hechos el imputado reconoció que había quemado la puerta de la vivienda de Celia A.G. "por amor". Además, testificó la ex pareja del acusado, quien manifestó que Gregorio "no era agresivo".

El juicio a Gregorio R.T. continuará mañana en la sección tercera de la Audiencia Provincial de Madrid con la comparecencia del hijo de Celia A.G. que se encontraba en el interior de la casa cuando se produjo el suceso.

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