MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa español, José Antonio Alonso, afirmó hoy que existe un desequilibrio "evidente" en las relaciones entre Estados Unidos y España en comercio de material de defensa, al tiempo que aseguró que la inversión nacional en el país norteamericano en este sector ha supuesto 5.000 millones de dólares en los últimos quince años frente a los 300 millones de dólares invertidos desde Washington en ese mismo periodo.
En una conferencia pronunciada en el Hotel Palace de Madrid ante los representantes de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España, con la asistencia destacada de su presidente de honor, el embajador de Estados Unidos, Eduardo Aguirre, el titular de Defensa aseguró que este desequilibrio "se irá corrigiendo en el futuro" y que no supondrá un obstáculo en las relaciones entre ambos países.
"El desequilibrio (comercial) es evidente y estamos convencidos de que, con el esfuerzo de todos, es un desequilibrio que se irá corrigiendo en el futuro pero que, en cualquier caso, no obstaculiza nuestra relación, que mantiene una fuerte confianza", indicó.
Alonso recordó que el 80 por ciento de la flota de aviación de combate española es de origen estadounidense --la Fuerza Aérea tiene cazas F-18 y F-5, fabricados por empresas norteamericanas-- y que España ha tomado "decisiones estratégicas" en esta misma línea como la incorporación a las fragatas F-100 --los buques de guerra más sofisticados que posee la Armada-- y a los futuros submarinos S-80 del sistema de combate AEGIS, también de esta misma nacionalidad.
"España quiere que nuestras relaciones sean cada vez mejores y nuestra cooperación más estrecha y aspiramos a ser correspondidos en la misma medida. Es difícil que el equilibrio se alcance exclusivamente en el ámbito de la defensa pero sí que se puede obtener o compensar en otros ámbitos", explicó.
El ministro subrayó que, "en cualquier caso", las relaciones entre Madrid y Washington son "de confianza en lo político, de cumplimiento en el ámbito empresarial" y representan, en general, "una alianza en lo defensivo" en la cual perseverar "en un marco europeo que refuerce un vínculo transatlántico robusto y efectivo" muy importante para España, Estados Unidos, Europa y el mundo.
En su intervención ante una nutrida representación de empresarios estadounidenses y españoles, Alonso también se refirió al convenio entre Estados Unidos y España en materia de cooperación de Defensa, suscrito en 1988 y vigente hasta 2011. Por primera vez desde su llegada al cargo en abril de 2006, el ministro reconoció que el tratado contiene "algunos desequilibrios", que apostó por "corregir" desde el entendimiento de ambas partes.
6.500 OPERACIONES AÉREAS ESTADOUNIDENSES EN ESPAÑA EN 2006
Tras este reconocimiento, Alonso aseguró que, durante 2006, Estados Unidos realizó unas 6.500 operaciones aéreas en territorio español y unos 168 buques recalaron en la península, operaciones todas ellas realizadas bajo el amparo de dicho tratado bilateral.
Alonso recordó el primer viaje oficial que realizó el pasado mes de noviembre para reunirse con su homólogo estadounidense, Donald Rumsfeld, y confío en que las buenas relaciones que mantuvo con él continúen con su sucesor en el cargo, Robert Gates, con quien se reunirá en el marco de la próxima reunión de la OTAN en Sevilla, el 8 y el 9 de febrero.
El ministro indicó que ambos países, "socios y aliados", mantienen las mismas preocupaciones por temas como Corea del Norte o Irán y están igualmente interesados en el futuro de Oriente Próximo y apuntó que España puede jugar como "interlocutor" entre Estados Unidos y sus vecinos centroamericanos y suramericanos.
Alonso sucedió en el turno de palabra al embajador estadounidense, Eduardo Aguirre, quien destacó su trayectoria tanto como en su anterior responsabilidad como titular de Interior como en la cartera de Defensa.
El representante diplomático norteamericano aseguró que las relaciones comerciales con España son "fuertes y sólidas", destacó la cooperación existente en materia de defensa y alabó la respuesta de Madrid a situaciones de crisis como el terremoto de Pakistán o el huracán Katrina y su protagonismo en misiones como Afganistán y Líbano.
Aguirre concluyó su parlamento resaltando que las relaciones militares entre Madrid y Washington constituyen la "piedra angular" de las relaciones bilaterales y apostando por trabajar para conseguir que esos lazos pasen de "buenos a buenísimos".