MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
El juez central de Instrucción de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz dejó hoy en libertad al joven de Bañolas (Gerona) Jaume Roura Caparellas, sin ningún tipo de medida cautelar, después de que este reconociera en su declaración haber quemado fotografías de los Reyes durante la manifestación que se celebró en la capital gerundense el pasado día 13 de septiembre.
El magistrado, que tomó declaración al joven durante unos diez minutos, acordó la transformación de las diligencias en prodecimiento abreviado para que la Fiscalía decida en diez días si solicita la apertura del juicio oral y mantiene la acusación contra Roura por un delito de injurias a la Corona. La fiscal Blanca Rodríguez pidió hoy su libertad provisional con fianza de 10.000 euros a prestar en el plazo de 48 horas, la retirada del pasaporte y la obligación de que realice comparecencias semanales en el juzgado.
En dos autos dictados hoy, uno en el que decreta la libertad del joven y otro en el que acuerda el procedimiento abreviado, el juez atribuye la quema de las fotografías a Roura y a "otro individuo desconocido" al que no se ha podido identificar. Al joven identificado*le atribuye "una injuria a la Corona" tipificada en el artículo 409.3 de Código Penal, que castiga al que "injuriare al Rey y la Reina en el ejercicio de sus funciones".
Pedraz señala que la quema de las imágenes de los monarcas constituye "un delito que no lleva aparejada pena grave" y acuerda no adoptar ninguna medida cautelar, al considerar que "no se constata riesgo de fuga". La Fiscalía, sin embargo, destacó en su escrito la "gravedad" de los hechos imputados al joven y pidió la aplicación de medidas cautelares, al entender que "existe un grave riesgo de que pueda tratar de eludir la acción de la Justicia".
Según el auto, el joven tuvo el ánimo de de injuriar a los Monarcas, como demuestra la comisión de una "acción injuriosa", "el comportamiento del imputado" --que apareció "encapuchado" durante la manifestación y, por tanto, "no estaría ejerciendo su derecho a la libertad de expresión"--, y el hecho de que no se acreditara "una intención diferente".
NO IDENTIFICA A SU COMPAÑERO
En su declaración, Roura reconoció la autoría de los hechos y ejercitó su derecho a permanecer en silencio cuando fue preguntado por la identidad de la otra persona que también encapuchada le acompañó en el acto de prender fuego a las imágenes de los monarcas, según explicó su abogado, Benet Salellas.
El joven imputado, que testificó tranquilo y utilizando el idioma catalán, justificó su actuación ante Pedraz como "un acto comprendido en la libertad de expresión y con el que pretendía mostrar su rechazo a la monarquía", según explicó su letrado. A la declaración también acudieron dos agentes de los Mossos d'Esquadra, que procedieron a su identificación a partir de las imágenes de dos vídeos de la televisión autonómica catalana y local de Gerona.
Mientras se producía la declaración, una treintena de independentistas catalanes se concentraba en la plaza de Colón de Madrid, a unos centenares de metros de la Audiencia Nacional, profiriendo gritos en catalán como "Yo también quemo la Corona española", "Visca la terra lliure (viva la tierra libre)" o "Caña, caña, caña, caña contra España".