El ex presidente reprocha al Gobierno que se empeñe en "ahondar" las diferencias con Estados Unidos
MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -
El ex presidente de Gobierno y presidente de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), José María Aznar, criticó esta mañana al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero por "debilitar internamente la nación" y haber cosechado en sus años de mandato "disgregación" dentro de España y "fracasos" en el exterior.
"Cuando los dirigentes de un país dedican sus energías a debilitar internamente la nación no se puede cosechar sino disgregación dentro y fracasos fuera", afirmó Aznar en la clausura hoy en Madrid de la primera edición del seminario conjunto organizado por FAES y el American Enterprise Institute.
El ex jefe del Gobierno resaltó que "una las cosas más extraordinarias" durante sus ocho años de mandato fue sentir "la irrupción de una nueva ambición nacional" en España, así como un "nuevo sentimiento" acerca del papel que nuestro país podía jugar en el ámbito internacional.
"En estos años España llegó a su cita con la Historia. A la hora correcta, en el lugar correcto y con los debidos amigos, asumiendo sus responsabilidades. Orgullosa como nación libre de extraños complejos", subrayó.
Sin embargo, opinó que ahora la situación es distinta o, incluso, "peor" ya que España ha perdido "poder, dinero e influencia" en Europa, mientras que Estados Unidos ve a España como un país "voluntariamente aislado" e Iberoamérica ha colocado a los españoles "al lado del populismo antiliberal".
En este sentido, reconoció que nadie cuenta con una "solución mágica" para los problemas del mundo, aunque aludió a continuación al Ejecutivo socialista al subrayar que "algunos tienen la capacidad de volver las cosas mucho peor, incluyendo la relación entre Estados Unidos y Europa, entre Estados Unidos y España". Aznar advirtió de que "a veces el poder del gobierno estriba en el poder de las malas ideas".
Pese a ello, puntualizó que es "optimista" sobre el futuro del país. "España es una nación fuerte y de una vitalidad sorprendente. A mí me gustaría ver a mi país caminando en la buena dirección. Y aunque yo ya no estoy en la política activa, sí lo estoy plenamente en el campo de las ideas", hizo hincapié.
El ex presidente precisó que desde esa posición hará cuanto esté en su mano para que España "vuelva a ser un país respetado y con prestigio" y se beneficie de una relación "especial" con Estados Unidos y "todas aquellas democracias que están en la lucha para derrotar al terror y difundir la libertad y la democracia".
Aznar subrayó que trabajó porque la relación entre Europa y España con Estados Unidos fuera "algo especial" para el vínculo trasatlántico. "Yo siempre llevé la contraria a quienes pretendían aumentar la distancia entre ambos lados del Atlántico y no puedo entender a quienes, con la responsabilidad de dirigir una nación europea y occidental como es la nuestra, se empeñan en ahondar las diferencias".
