El Ministerio de Medio Ambiente apunta a las infraestructuras como una de las causas fundamentales de la pérdida de biodiversidad
GIJÓN/OVIEDO, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras del Principado de Asturias, Francisco González Buendía, ha apuntado este jueves en Gijón que si no se logra un consenso entre las tres autonomías --Principado, Cantabria y Castilla y León-- es mejor que la gestión del parque de Picos de Europa siga en manos del Estado. No obstante, ha enfatizado que es muy limitada la posibilidad de que no haya acuerdo.
Así lo ha indicado tras la inauguración de las jornadas técnicas sobre 'Medidas compensatorias de proyectos de infraestructuras viarias que afectan a la Red Natura 2000', que se desarrollan en el recinto ferial gijonés 'Luis Adaro, donde también se ha referido a esta cuestión'. Según él, existe un acuerdo "en lo sustancial", pero ha avanzado que, antes de fragmentar el parque, algo que ha dicho que no permiten las sentencias dictadas ni la legislación, "sería preferible que siguiera como está".
Buendía ha apuntado que en 15 días habrá una reunión en Asturias de las tres comunidades, donde se seguirán acercando posturas de cara a la transferencia de la gestión. En su opinión, lo importante es la preservación de la unidad ambiental del parque.
El consejero ha indicado que se está trabajando en algunos flecos, sobre todo en el tema de personal y organización. En este sentido, ha señalado que hay "diferencias de criterio y dificultades tipo técnico jurídico que hay que limar", aunque ha puntualizado que la voluntad tanto de las tres comunidades como del Estado es que se produzcan estas transferencias.
El titular de Medio Ambiente ya lo había advertido en la inauguración de las jornadas, en las que había trasladado un mensaje de confianza en que se llegue a un acuerdo pese a las dificultades.
Asimismo, durante su intervención, ha señalado que la aplicación de medidas compensatorias motivadas por la construcción de infraestructuras es "muy complicado, pero absolutamente necesario". A su juicio, el resultado es "bastante bueno" aunque el coste sea más alto.
También ha aludido a los 62 espacios protegidos declarados dentro de la Red Natura y ha puesto de ejemplo las dificultades de alguna de las grandes infraestructuras, como el túnel del Rañadoiro, que será objeto de visita este viernes por los participantes en el evento, o la carretera de Panes (Peñamellera Baja).
PÉRDIDA DE BIODIVERSIDAD
En la jornada inaugural también ha intervenido la subdirectora general de Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Marta García Pérez, quien ha dejado claro que "el impacto cero no es posible" cuando se construyen infraestructuras.
Asimismo, ha señalado que el reto es disminuir la pérdida de biodiversidad que se ha ido aumentando por la fragmentación de hábitats causada por las infraestructuras, aunque ha puntualizado que no es la única causa de esa pérdida. Un reto al que se tenía que haber dado respuesta este año, pero que no se pudo realizar, aunque sí un análisis de las causas.
Para García Pérez, es necesaria la aplicación de medidas que aseguren un desarrollo sostenible compatible con el medio natural. De ahí que se haya creado un grupo de trabajo formado por expertos al objeto de reducir los efectos de la fragmentación de los hábitats.
Para este fin, se han editado ya cuatro publicaciones "de máximo interés", según ella, donde se habla de las medidas a adoptar para conseguir ese objetivo. Unas medidas que serán debatidas durante esta jornada.
