BILBAO, 14 May. (EUROPA PRESS) -
El Obispo de Vitoria, Miguel Asurmendi, expresó hoy su condena del atentado perpetrado por ETA contra la casa cuartel de Legutiano (Alava), "de sus autores materiales, de sus inspiradores y colaboradores", y manifestó que "la vida humana nunca debe ser medio de búsqueda de cualquier tipo de fines" porque "la persona humana es fin en sí misma y digna de respeto".
"Elevo mi oración, junto con la comunidad diocesana, a Dios Padre, para que acoja en su Reino de la Vida a Juan Manuel Piñuel y transmito a su esposa, su hijo y a todos sus familiares y compañeros la cercanía, el reconocimiento y la oración de la comunidad cristiana de Álava", afirmó en un comunicado.
Asimismo, transmitió a los heridos por el atentado terrorista sus "oraciones y mejores deseos para su pronto restablecimiento", y manifestó su solidaridad "con todos los habitantes de la Casa Cuartel de Legutiano y los vecinos afectados por este atentado".
Por último, manifestó su esperanza "en que este pueblo acabará alcanzando la paz, la sana convivencia en el bien común". "Así lo pido al Señor, Príncipe de la paz", concluyó.
