MADRID 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Nacional condenó hoy a dos años de prisión por un delito de atentado a agentes de la autoridad a los jóvenes Iker Otamendi, Iñaki Aristu y Mikel López, al considerar probado que amenazaron e insultaron durante una manifestación en San Sebastián a varios agentes de la Ertzaintza con expresiones como 'zipayos asesinos' o 'vais a morir'.
Lanzaron además contra ellos cócteles molotov, piedras y botellas, hasta tal punto que los ertzainas se vieron obligados a efectuar varios disparos al aire, indica la sentencia, hecha pública hoy.
El tribunal de la Sección Primera de la Sala de lo Penal ha absuelto a los tres procesados del delito de desórdenes públicos del que también les acusaba la Fiscalía al considerarles responsables de desperfectos en varios cajeros y mobiliario urbano. Los magistrados explican en su resolución que estos daños se produjeron con anterioridad a la agresión a los agentes y no pueden ser imputados a los acusados.
Otamendi, Aristu y López fueron detenidos por dos agentes de paisano de la policía autonómica que les reconocieron como tres de las personas que habían participado en los ataques a la Ertzaintza desencadenados durante la marcha posterior a un homenaje al miembro de ETA Imanol Gómez Gutiérrez, fallecido en accidente de tráfico en Francia cuando intentaba huir de un control de la Gendarmería francesa.
El tribunal ha considerado para dictar la condena las declaraciones de los agentes que practicaron las detenciones, que describieron con detalle la ropa que llevaban los acusados durante su participación en la algarada.
Durante el juicio, dos de los acusados reconocieron su participación en el acto aunque indicaron que no tomaron parte en ningún enfrentamiento y ni siquiera presenciaron ataques contra ertzainas. Por su parte Aristu explicó que simplemente se encontraba en esa zona porque tenía una cita con una chica.
No obstante, la sentencia expone que ninguno de los testigos aportados por la defensa de los jóvenes ha podido garantizar que estuvo con ellos durante todo el tiempo que se prolongaron los enfrentamientos con la Ertzaintza, por lo que sus declaraciones no sirven para excluir a los acusados como participantes en el ataque.