El Ayuntamiento de San Sebastián homenajea a los guardias municipales víctimas de ETA Miguel Garciarena y Manuel Peronié

Actualizado: lunes, 13 octubre 2008 17:06

Elorza se felicita porque "la inmensa mayoría" de la sociedad vasca "ha madurado y ha abandonado posiciones de cobardía" frente a ETA

SAN SEBASTIÁN, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de San Sebastián celebró hoy un homenaje a los guardias municipales Miguel Garciarena Baraibar y Manuel Peronié Díez, asesinados por ETA en 1980 y 1983, respectivamente. Con este acto, el Consistorio quiso reafirmar su "compromiso político, ético, moral y humano de apoyo y reconocimiento a las víctimas del terrorismo y de la violencia".

En el reconocimiento, estuvieron presentes el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, la concejala de Derechos Humanos, Arritxu Marañón, el concejal de Guardia Municipal, Ernesto Gasco, y representantes de todas las formaciones representadas en el Ayuntamiento donostiarra y la responsable de la Dirección de Atención a las Víctimas del Gobierno vasco, Maixabel Lasa.

Asimismo, acudieron al homenaje miembros de la Comisión de Derechos Humanos, miembros del Foro de Víctimas, el viceconsejero de Seguridad del Ministerio de Interior, Valentín Ruiz, su director de Gabinete, Gregorio Martínez Garrido, la presidenta de Juntas Generales de Guipúzcoa, Rafaela Romero, los tíos de Manuel Peronié y el hijo de Manuel Garciarena y su compañera.

El homenaje consistió en el descubrimiento de dos placas en las dependencias de la Guardia Municipal, junto a la del agente Alfonso Morcillo, asesinado también por ETA en diciembre de 1994.

Arritxu Marañon explicó que este homenaje surgió a través e la Comisión Especial de Derechos Humanos del Ayuntamiento, que adoptó el acuerdo, por unanimidad de todas las fuerzas democráticas con presencia en el mismo, de hacer "un homenaje de reconocimiento a todas aquellas personas que hubieran desempeñado una labor dentro del mundo del ayuntamiento y que, en su día, hubieran sido asesinadas por la banda terrorista ETA".

"RESPONSABILIDAD CON LAS VICTIMAS"

Por su parte, Odón Elorza tuvo palabras de recuerdo para los dos agentes y destacó "la responsabilidad" que tienen las instituciones y la sociedad de "recordarles y de reconocerles, porque es lo que tenemos que hacer y a lo que estamos obligados y porque, además, lo hacemos de corazón".

No obstante, lamentó que, aunque hayan pasado 25 años en el caso de Peronié y 28 en el de Garciarena, todavía "se siga hablando de atentados, de asesinatos, de actos de terrorismo por parte de ETA, de actos reivindicados, de actos que fueron muy dramáticos, muy tristes, en su día, pero que seguramente pasaron muy desapercibidos para el gran público porque entonces había mucho miedo".

En ese sentido, recordó que en aquella época "no había respuesta ciudadana" y era "poca la gente que respondía, que salía a la calle, que protestaba, que denunciaba a ETA por esos asesinatos". "Siempre quedaba la duda de, como se decía entonces, algo habrán hecho, por algo los habrán matado", señaló, para lamentar que, en la actualidad, "tampoco, a veces. se tenga la respuesta de la dimensión que debiera requerir este tipo de atentados".

"Afortunadamente, la sociedad vasca, la inmensa mayoría, ha madurado y ha abandonado posiciones de cobardía, de distanciamiento, de mirar hacia otro lado. Esa es la verdad, ésa es la historia que arrastramos, la que nos lastra a todos los vascos y que algún día conseguiremos superar del todo, pero que está ahí", subrayó.

"DEUDA MORAL"

Elorza consideró que hay "una deuda moral con muchísimas personas de todo tipo, con uniforme, sin uniforme, que, en su día, fueron asesinadas, dejaron esta sociedad y no han tenido debidamente el reconocimiento". Asimismo, subrayó "la soledad y tristeza" con la que muchas familias han tenido que afrontar estas situaciones.

El alcalde señaló que, con el acto de hoy, "no es que hagamos justicia exactamente" porque las víctimas, en la actualidad, han estado presentes en muchos actos de reconocimiento, como la concesión de la medalla de oro de la ciudad a las víctimas del terrorismo, el monolito instalado en Alderdi Eder o el proyecto del 'Jardín de la Memoria' en Riberas de Loyola, que "está tardando, pero que al final será realidad".

Finalmente, expresó "de modo fraternal, en nombre del conjunto de la ciudadanía", su "cariño y abrazo de verdad emocionado" a las familias. "Ojalá no tengamos que continuar con este tipo de actos con nuevas víctimas que se sumen a una lista ya demasiado larga de asesinados injustamente", deseó Elorza, quien insistió en que estos "asesinatos innecesarios, injustos y gratuitos han provocado un gran sufrimiento a este pueblo y todavía siguen condicionando la vida e impidiendo la normalización".

"Más allá del voluntarismo de esta declaración, tenemos que ser fuertes, tener coraje cívico y convicciones plenas en lo que debe ser un estado democrático de derecho, que debe trabajar por la paz y la libertad. Y nosotros amamos la libertad y, por eso, estamos en esta causa", concluyó.