MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -
Varios diputados socialistas partidarios de una oposición más contundente a las políticas del Gobierno han saludado este jueves que su secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, haya sido "permeable a lo que pide la calle" y se haya decidido a pedir una comisión de investigación sobre Bankia.
Además, algunos parlamentarios que respaldaron públicamente a Carme Chacón en su candidatura por la Secretaría General del PSOE creen que en la decisión del Grupo Socialista también pesó la intervención de la exministra pidiendo una "comisión de la verdad" durante la reunión semanal de los diputados el pasado martes.
CHACON LES PUSO NERVIOSOS
"Que hablara ella les puso nerviosos", afirma un diputado. "Ha tenido el don de la oportunidad", dice otra, que cree que Rubalcaba cometió el error de ponerse a la defensiva durante esa reunión. El martes fue la primera vez que Carme Chacón tomaba la palabra en una reunión del Grupo Parlamentario desde que perdió el Congreso de Sevilla frente a Rubalcaba.
Sin embargo, los mismos diputados descartan que este episodio sea el inicio de una batalla interna, o que Chacón vaya a erigirse en portavoz de quienes reclaman a Rubalcaba que se desmarque más del Ejecutivo. "Ahora no toca"; "ella mide muy bien los tiempos", dicen varias fuentes. La exministra no quiso hacer declaraciones después de esa reunión de diputados y apenas se la ha visto por los pasillos del Congreso en los tres días de pleno.
De hecho, todos los consultados rechazan ver el asunto de la comisión de investigación como una confrontación interna y subrayan que lo importante es que la dirección del grupo haya entendido el mensaje de los ciudadanos. Chacón, apunta uno de sus partidarios, no hizo más que trasladar la preocupación de la gente, para quien el asunto de Bankia es "la gota que colma el vaso". "Tenía que hablar porque el tema era muy sangrante", afirma otra.
"Lo importante es que hay que empezar a diferenciarse, la oposición está para oponerse", dice un diputado que lleva tiempo reclamando más contundencia. Este sector reconoce que Rubalcaba y la dirección del grupo nunca se opusieron a una comisión de investigación pero no compartía su empeño en pedir primero comparecencias parlamentarias, aunque en la práctica pueda ser más ágil.
"Eso la gente no lo entendía, porque no está en los matices, más bien pensaba que teníamos algo que ocultar", ilustra uno de ellos. Así les sucedía, por ejemplo, a los diputados valencianos o madrileños, cuyos partidos han pedido comisiones de investigación en sus respectivas asambleas autonómicas.
RUBALCABA APOSTABA POR OTRA FÓRMULA
Sin embargo, Rubalcaba ha dejado claro este jueves que no ha pedido una comisión de investigación porque esté convencido de sus bondades, sino porque cree que el PP no le ha dejado otra opción al no aceptar las comparecencias públicas de los gestores y exgestores de Bankia y del gobernador del Banco de España.
Según Rubalcaba, la "experiencia parlamentaria" demuestra que la mejor "fórmula" era la que él proponía, comparecencias y discusión "a fondo" y, en función de la información obtenida, decidir cuál es la mejor vía para seguir investigando.
Desde que el miércoles por la noche se registró la petición, la dirección socialista ha incidido en que ésta se debió a la actitud del PP al rechazar las comparecencias y no a las peticiones que se sucedieron en la reunión del Grupo del martes. Incluso han precisado que el texto estaba elaborado desde el lunes por la tarde.
Con todo, la opinión del grupo socialista no es unánime. Hay fieles a Rubalcaba que querían una comisión de investigación y diputados de todas las tendencias que contemplan el mecanismo con recelo y preferirían que las responsabilidades las depuren los tribunales. Incluso algún afín a Carme Chacón que cree que Rubalcaba "lo tenía todo previsto desde el principio".
