Basagoiti pide a Urkullu que "se ponga a liderar el país" y "contrarrestar la imagen" de la manifestación del sábado

Antonio Basagoiti
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 14 enero 2013 15:02

Critica "el encierro en palacio" de lehendakari y exige que "no deje en manos de Batasuna la imagen de los vascos"

BILBAO, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, afirma que el lehendakari, Iñigo Urkullu, tiene "la obligación de contrarrestar la imagen de los vascos que intentó proyectar" la manifestación de este pasado sábado en favor de los presos de ETA. En este sentido, le censura que "contemple el devenir de este país desde palacio" sin "inmutarse" mientras "la imagen de Euskadi la capitalizan quienes más daño pueden provocar. "Tiene que salir a la calle de una vez y ponerse a liderar este país", reclama.

En un post colgado este lunes en su blog, titulado 'Batasuna en la calle, Urkullu en palacio', recogido por Europa Press, destaca que "resulta paradójico que, justo el día en el que se celebraba el 25 aniversario de la firma del Pacto de Ajuria Enea, el acuerdo político más relevante del conjunto de los partidos democráticos vascos en la lucha contra ETA, las calles de Bilbao las ocuparan quienes 25 años después y un largo reguero de víctimas a espaldas de la organización terrorista, siguen queriendo poner en valor la trayectoria de quienes cumplen condena por delitos de terrorismo".

"Viendo esa imagen, y con toda lógica y razón, alguien podría pensar que poco se ha avanzado en la normalización democrática en este país si transcurrido tanto tiempo, un cuarto de siglo nada menos, alrededor de cien mil siguen saliendo a las calles bilbaínas dispuestas a proclamar su apoyo a los presos de ETA sin acompañar reproche alguno a nada de lo hecho por la banda terrorista en este largo tiempo", ha añadido.

Tras asegurar que "lo cierto es que la sociedad vasca ha avanzado mucho en su lucha por conquistar los derechos y libertades democráticas", ha recordado que, "desde aquel compromiso de Ajuria Enea, la debilidad de ETA ha sido progresiva, con altibajos en el consenso democrático y errores políticos de por medio, hasta ser definitiva y empujarla con el Estado de Derecho en la mano a una posición sin salida y su renuncia pública a los atentados".

"Los vascos somos hoy más libres que aquel 12 de enero de 1988. Estamos escribiendo las primeras líneas de un futuro en paz y en libertad que debe ser definitivo. Pero, para eso, tenemos que ser capaces también de ponernos de acuerdo en el pasado, sin enredos, sin falsos lenguajes y con la claridad suficiente para que el terrorismo no encuentre resquicio alguno por el que colarse nuevamente en la sociedad vasca", ha manifestado.

En este sentido, ha indicado que "la manifestación del sábado buscaba precisamente eso, mantener resquicios abiertos a la banda terrorista y a su propia trayectoria, utilizando, una vez más, a sus presos, ese instrumento al que tantas veces ha recurrido ETA para a agitar su propaganda". "Los presos volvieron a ser la excusa para salir a la calle porque lo realmente importante era reforzar y revalorizar el camino recorrido por la banda y al que ninguno de los impulsores de la marcha está dispuesto a renunciar", ha destacado.

Por ello, ha considerado "difícil entender" que el lehendakari, Iñigo Urkullu, "opte por seguir contemplando el devenir de este país desde palacio". "Sin inmutarse mientras nuevamente, y 25 años después de Ajuria Enea, la imagen de Euskadi la capitalizan quienes más daño pueden provocar a su credibilidad y confianza", ha destacado.

A su entender, "el encierro voluntario y el silencio" del presidente vasco "genera dudas y engorda la incertidumbre política". Según ha manifestado, "Urkullu tiene la obligación de contrarrestar la imagen de los vascos que intentó proyectar la manifestación del sábado".

En esta línea, ha manifestado que "los vascos no podemos caer en la tela de araña que pretende la estrategia sobre la que se escribe el discurso de Batasuna, y discutir sobre presos terroristas y políticas penitenciarias es hacerlo", porque, de esa manera, "la exigencia democrática hacia sus dirigentes queda en un segundo plano".

"Urkullu tiene que salir a la calle de una vez y ponerse a liderar este país, dejarse de cálculos partidistas y llevar la imagen de Euskadi hacia el futuro y no hacia el pasado como pretendió la manifestación del sábado", ha insistido.

IMPULSAR ACUERDOS POLÍTICOS

De este modo, ha afirmado que "al lehendakari le corresponde, como hace 25 años, impulsar acuerdos políticos que consoliden nuestra democracia, y que abran sin complejos y con responsabilidad una revisión crítica y definitoria del terrorismo de ETA, de su historia y trayectoria, para que el nuevo tiempo que estamos abriendo los vascos no deje resquicio a posiciones que pretenden en última instancia legitimar el terror".

"Euskadi necesita un lehendakari en la calle, pisando la calle. No necesita un lehendakari encerrado en palacio. Queremos que Urkullu lidere este país en claves de futuro y de progreso, y no deje en manos de los dirigentes de Batasuna, de su estrategia y sus objetivos la imagen del conjunto de los vascos. Eso sólo alimenta la desconfianza y la inseguridad en lo vasco. Y mal que nos pese a todos, eso fue lo que ocurrió el pasado sábado con la manifestación celebrada en Bilbao", ha concluido.