MADRID 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Catedral de la Almudena, escenario de un ataque de anarquistas radicales el pasado febrero, dispone desde hace meses de un protocolo de seguridad que se aplica en grandes celebraciones por su importancia o en las que se cuenta con gran afluencia de gente, según han informado a Europa Press fuentes del Arzobispado de Madrid.
Estas mismas fuentes han declinado ofrecer más detalles acerca de los mecanismos con los que cuenta este protocolo por razones de prevención y seguridad.
Según precisan, ya había planes de establecerlo antes de que el denominado 'Comando Insurrecionalismo Mateo Morral' colocase un artefacto explosivo en el templo que no llegó a deflagrar al ser descubierto y desactivado por la Policía. No obstante su aplicación definitiva tuvo lugar después de aquel ataque.
Tras la explosión este miércoles en la Basílica del Pilar a cargo del mismo grupo de extrema izquierda el Delegado del Gobierno de Aragón, Gustavo Alcalde, ha asegurado que se va a estudiar cómo mejorar la medidas de seguridad.
La Basílica cuenta con algunas cámaras de seguridad en su interior y en algunas de las puertas de acceso al templo, pero no estaban en funcionamiento en el momento en el que se cree que entraron los desconocidos a colocar un artefacto explosivo, precisaron a Europa Press fuentes del Arzobispado.
Aunque en un primer momento fuentes policiales indicaron que no había cámaras ni en el interior del edificio religioso ni en su perímetro, este portavoz indicó que existe un circuito cerrado de cámaras que se utilizan sólo para retransmitir las misas cuando se están celebrando.
Además hay cámaras de seguridad en algunas de las puertas (la Basílica tiene tres puertas de acceso pero habitualmente se usa sólo una), pero no estaban activadas, precisa esta misma fuente.
En la plaza de la Basílica Pilar también se ubica el propio Ayuntamiento de la ciudad que sí cuenta con cámaras de seguridad aunque orientadas a sus propios accesos y no a la plaza.