MADRID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, ha reconocido este lunes que no confía en que la votación secreta en el Congreso sobre la reforma de la ley del aborto vaya a cambiar el resultado y ha exigido al Gobierno que retire el anteproyecto de ley porque "no es un debate que esté pidiendo la sociedad".
La Ley Orgánica de Protección de los Derechos del Concebido y de la Mujer Embarazada, la reforma de la Ley del Aborto que lidera el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, pasará este martes su primer examen en el Congreso de los Diputados con una votación secreta, con papeletas y urna, a instancias del Grupo Socialista. Esta misma semana la Cámara debatirá también una moción de Izquierda Plural que pide la supresión de la norma.
"Da igual el voto secreto o no", ha augurado el líder de IU, que ha adelantado que, en el caso de que el PP perdiera la votación pese a su mayoría absoluta, debería dimitir todo el Gobierno y convocar de inmediato elecciones generales.
Cayo Lara ha defendido que el Ejecutivo no debe "atentar contra los derechos fundamentales" de las mujeres y restringir los derechos de los que gozan con la actual legislación. En todo caso, ha sostenido que, si se modifica la ley vigente, debería ser precisamente para "ampliar" esos derechos.
Según ha defendido, la mayoría de la sociedad está de acuerdo con la actual ley, "incluida una parte importante" de los votantes de Partido Popular. "No queremos que las mujeres tengan que volver a viajar a Londres para abortar ni que la jerarquía religiosa marque el Boletín Oficial del Estado", ha esgrimido.
En este sentido, ha propuesto medidas de prevención y educación sexual "en las escuelas" para evitar embarazos no deseados en vez de "represión que devuelve a los tiempos del nacional-catolicismo" y "lleva 40 años atrás".
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