Chad.- La azafata coruñesa pide que vuelvan sus compañeros "en cuanto sea posible" y da gracias a Sarkozy y Zapatero

Europa Press Nacional
Actualizado: lunes, 5 noviembre 2007 18:14

A CORUÑA 5 Nov. (EUROPA PRESS) -

Carolina Jean López Mils, la azafata coruñesa de Girjet liberada ayer después de ser retenida en Chad, aseguró hoy a su llegada al aeropuerto coruñés de Alvedro que se encuentra "bien" pero "deseando que vuelvan" sus compañeros "en cuanto sea posible" y dio las gracias a los presidentes francés y español .

La joven azafata llegó hoy alrededor de las 15.30 horas al aeropuerto coruñés todavía visiblemente afectada después de aterrizar en la base aérea madrileña de Torrejón de Ardoz alrededor de las 21.00 horas de ayer.

Carolina Jean declaró, en breves declaraciones a los medios de comunicación que esperaban su llegada en Alvedro, que "ha sido una experiencia muy dura" pero reconoció que les "han tratado bien" y que ahora lo que quiere es "estar tranquila" y "esperar a que vuelvan los demás muy pronto", repitió.

Las cuatro azafatas españolas liberadas en el Chad --Carolina Jean, Tatiana Suárez, Mercedes Calleja y Sara López-- llegaron a España en el Airbus A-319, junto al presidente francés, Nicolas Sarkozy, y los tres periodistas franceses. A su llegada les esperaba el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos.

AGRADECIMIENTO

Sobre esto Jean aseguró estar "muy agradecida", tanto a José Luis Rodríguez Zapatero como a Nicolás Sarkozy. "Estamos muy agradecidos a ellos por haberse dado tanta prisa en sacarnos de allí", reconoció.

En estos momentos continúan retenidos en Chad otros tres españoles también miembros de Girjet, el sobrecargo, Daniel González, y el piloto y el copiloto del avión de la compañía aérea, Agustín Rey y Sergio Muñoz.

Los siete españoles fueron detenidos el pasado 25 de octubre junto a tres periodistas y seis miembros de la ONG francesa El Arca de Zoé, todos ellos franceses, cuando intentaban trasladar a 103 menores huérfanos a Francia para ser adoptados, aparentemente infringiendo las leyes del Chad, por lo que fueron acusados de tráfico de menores. Posteriormente también fue detenido un piloto belga que había trasladado a los niños hasta la ciudad de Abéché.

Contenido patrocinado