MADRID 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las negociaciones sobre la Ley de Memoria Histórica van "en buena dirección" pero este mediodía no se había cerrado un acuerdo con CiU, según aseguró el portavoz de los nacionalistas en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida. Mientras tanto, el portavoz de IU-ICV, otro de los grupos con los que el PSOE intenta pactar la norma, avisó de que "el tiempo se agota".
El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, admitió que las conversaciones con el Gobierno y con el PSOE "van en buena dirección", pero dejó claro que todavía no se ha cerrado un acuerdo.
Es más, recordó que esta norma es "consecuencia de iniciativas de ERC e IU-ICV", que CiU no consideraba "necesaria" una ley de este tipo y que ya advirtió de que este tipo de asuntos hay que tratarlos con "cuidado y mucha prudencia" porque "la memoria es plural y se trata de una opción personal".
También hizo hincapié en dos de las enmiendas planteadas por su formación. En concretó citó la que persigue que entre los beneficiarios de la ley se incluya a quienes sufrieron persecución por razones religiosas, independientemente de que fueran o no católicos, según recalcó Duran.
Además, explicó que su formación también reclama que no sólo los tribunales militares dictaron sentencias injustas, sino que en la retaguardia republicana también hubo resoluciones judiciales de dudosa legalidad decididas por jurados.
MÁS RESPONSABILIDAD.
En una rueda de prensa posterior, Joan Herrera, portavoz del grupo parlamentario de IU-ICV, avisó a los socialistas de que "el tiempo se agota" y que "no se puede seguir deshojando la margarita". "Más responsabilidad histórica y menos cálculo electoral", aconsejó.
Según dijo, la clave estará en la redacción de la exposición de motivos y su pretensión es ser exigente ante los socialistas sabiendo que, si finalmente se llega a un acuerdo, el texto resultante no será el de IU-ICV, pero tampoco el del PSOE.
Por su parte, el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà quiso recordar, ante la posibilidad de que los demás cierren un acuerdo con el PSOE, que su grupo nunca avalará una ley que no reconozca la condición de víctima a todos los represaliados, ya sean personas físicas o jurídicas; que no anule los juicios franquistas; que no restituya todo el patrimonio expoliado y que no declare ilegal la dictadura de Franco.