Condenados dos hombres a arresto domiciliario por implantar silicona a una mujer en los pechos sin preparación médica

Actualizado: sábado, 27 enero 2007 16:41

BARCELONA, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Barcelona ha confirmado la pena de arresto domiciliario que un juzgado de la capital catalana impuso a dos hombres por realizar implantes de silicona a una mujer en los pechos sin preparación médica para ello y a cambio de 400 euros. A causa de la intervención, practicada en 2003, la afectada sufre lesiones quísticas de las que tendrá que operarse.

De esta manera, la Sección Décima de la Audiencia ratifica el fallo del Juzgado Penal número 22 de Barcelona, que condenó a Juan P.L. a 14 fines de semana de arresto por un delito de lesiones por imprudencia y a Manuel O.E. a cinco fines de semanas de arresto como cómplice del primero.

Los dos procesados, además, deberán indemnizar a la víctima, Pilar del Carmen A.E.A., con los 400 euros que le cobraron por realizarle los implantes y con la cantidad que se determine en ejecución de la sentencia por el tratamiento que requieren las lesiones que padece.

Los hechos se remontan a julio de 2003, cuando la afectada se dirigió al domicilio de Juan P.L. y Manuel O.E., en la calle Lancaster de Barcelona, para realizarse implantes de silicona en los pechos, ya que varias personas le habían recomendado que acudiera a los acusados porque se lo harían "a buen precio".

Tras hablar con los procesados, la víctima acordó con ellos un precio de 400 euros, a sabiendas de que Juan P.L. y Manuel O.E. carecían de cualquier titulación y preparación médica para realizar la intervención, según declara probado la sentencia de la Audiencia de Barcelona.

Llegado el día de realizar el implante, los acusados colocaron una sábana en el sofá del domicilio para que Pilar del Carmen A.E.A. pudiera estirarse en él y, "sin anestesia y sin ningún tipo de asepsia, análisis o cuestionario de alergias", Juan P.L. le inyectó la silicona en los pechos directamente con una jeringuilla que Manuel O.E. se encargaba de rellenar.

A consecuencia de la intervención, a la afectada le aparecieron varios bultos en ambos pechos, derivados de lesiones quísticas, y dos cicatrices puntiformes en la zona superior de las mamas, correspondientes a las zonas de inyección, que constituyen un perjuicio estético. Según la sentencia, la mujer deberá operarse para recuperarse de sus lesiones.

ABUSARON DE LA CREDULIDAD DE LA AFECTADA.

La defensa de los acusados recurrió la sentencia de primera instancia alegando que la víctima se sometió "libre y voluntariamente" a la intervención pese a saber que Juan P.L. y Manuel O.E. no eran médicos, por lo que asumió el riesgo de un fracaso en la implantación de silicona. Según los abogados, tampoco quedó acreditada la relación entre la intervención y la aparición de los bultos en los pechos de la afectada.

No obstante, según la Sección Décima, "no se trata tanto de una asunción del riesgo por parte de la víctima, sino de un abuso por parte de los acusados de la credulidad de la mujer quien, movida por un legítimo interés de realizarse unos implantes de silicona en ambos pechos y seguramente por causa de una situación económica precaria que no le permite acudir a un centro médico especializado en dichas intervenciones, cree confiadamente en la capacidad técnica de Juan P.L. para realizar este tipo de implantes".

El Tribunal recuerda también la declaración de la forense que examinó a Pilar del Carmen A.E.A., quien señaló que los bultos aparecen "cuando se aplica la silicona en capas donde no debería aplicarse" y que "un facultativo que lo hubiera hecho bien lo hubiera inyectado en las capas correctas".

Teniendo en cuenta, además, que la afectada relató los hechos con "plena concordancia" y que los acusados no negaron durante el juicio la "atípica" intervención que le practicaron, la Audiencia de Barcelona ha decidido confirmar íntegramente la sentencia del Juzgado Penal número 22 de la Ciudad Condal.