SANTA CRUZ DE TENERIFE, 9 May. (EP/IP) -
Los presidentes de la Confederación Provincial de Empresarios de Santa Cruz de Tenerife (CEOE), José Fernando Rodríguez Azero, y de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), Mario Rodríguez, manifestaron hoy su rechazo una eventual prórroga de la moratoria turística al tiempo que abogaron por que la Administración ejerza una "disciplina urbanística" que suplante a la moratoria como mecanismo de regulación de la construcción en la actividad turística.
Los dos líderes empresariales canarios señalaron que son conscientes de la situación "contradictoria" por la que atraviesa el sector hostelero, en el que "la mayoría" de los empresarios aboga por prorrogar su vigencia. "Se trata de una terrible contradicción. Los empresarios turísticos temen que un segundo cambio en las reglas de juego empeore la difícil situación por la que atraviesan ahora y ahora quieren evitar que el Gobierno de un segundo salto al vacío con otro intervencionismo feroz como el de la primera moratoria", señaló Mario Rodríguez.
Ambos presidentes criticaron con dureza la moratoria. Azero indicó que sus efectos "hasta ahora no han sido positivos" y apuntó que la moratoria fracasó en el objetivo de disminuir la construcción de complejos turísticos de baja calidad al "acelerar" la puesta en el mercado de "más de 90.000" camas que "se incorporaron a la oferta del sector de forma precipitada ante el anuncio de la moratoria en 2003".
Mario Rodríguez fue aún más lejos y calificó a la moratoria como "mala" por sus efectos en la economía regional, ya que produjo un "frenazo mental" a la inversión extranjera en la región. Los inversores foráneos pensaron que Canarias estaba cerrada a las inversiones ya que los proyectos de "gran calidad resultan muy difíciles de tramitar ante las autoridades", lo que propició la creación de "unas 40.000" camas en mercados emergentes del entorno, que "son competidores directos de las islas". Para Rodríguez, la moratoria turística obedece a una "visión miope" de la realidad canaria.
Tanto Azero como Rodríguez se mostraron partidarios de "mecanismos" que favorezcan la construcción de proyectos turísticos "de calidad" en Canarias. Aunque la moratoria actual fue creada, precisamente, para ese objetivo y permite de forma excepcional la construcción de complejos que "aporten valor" a la actividad en la región, ambos líderes empresariales descartaron de manera específica a la moratoria como fórmula de regulación para el turismo canario. Aseguraron que presentarán sugerencias al Ejecutivo en materia de políticas turísticas "tras la próxima reunión sectorial" que mantendrán los empresarios de la región. .
