El Congreso amplía su Diputación Permanente para mantener la proporción tras la disolución del grupo de CC-NC

MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Junta de Portavoces del Congreso acordó hoy, una vez que se ha ratificado la disolución del grupo de Coalición Canaria-Nueva Canarias, ampliar en diez miembros la Diputación Permanente de la Cámara para mantener la proporción y correlación de fuerzas en este órgano parlamentario que ejerce las funciones del Pleno en los periodos no ordinarios.

Según informaron a Europa Press en fuentes parlamentarias, la Diputación Permanente pasará de los 38 miembros que tenía tras la desaparición de CC-NC a 49, aumentando cuatro diputados el PSOE, dos el PP y uno cada uno de los cinco grupos restantes. A estos componentes se suma el presidente del Congreso, Manuel Marín, que ocupa la Presidencia de la Diputación Permanente en razón de su cargo.

De esta forma, se corrige la situación que había quedado tras reducirse los votos de la oposición, ya que, sin CC-NC, el PSOE había quedado con 19 diputados (incluyendo a Marín), y se situaba al borde de la mayoría absoluta en el órgano parlamentario que funciona en los periodos no ordinarios de sesiones. Con el reajuste aprobado hoy, los socialistas suben a 23 diputados, pero de un total de 50 diputados, por lo que necesitarán a dos grupos minoritarios para ganar votaciones.

En el caso de las comisiones parlamentarias, se ha optado por restar el puesto que ocupaba CC-NC, con lo que su composición pasa de 39 a 38 miembros, sin introducir más retoques. Según la distribución acordada al inicio de legislatura, el PSOE contaba con 18 diputados frente a 15 del PP y uno de cada uno de los seis grupos minoritarios (CiU, ERC, PNV, IU-ICV, CC y Mixto), lo que daba un total de 21 votos a la oposición, que ahora se quedará en 20.

LA NECESIDAD DE SUMAR UNO O DOS GRUPOS.

El nuevo escenario coloca al PSOE cerca de la mayoría absoluta en las comisiones parlamentarias y sólo precisaría del voto de un grupo y la abstención de otro para ganar las votaciones, todo ello precisamente en el último periodo de sesiones de la legislatura, cuando le 'flaquean' las alianzas con las formaciones minoritarias.

Hace dos semanas, el portavoz parlamentario de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, ya protestó por la reducción del número de diputados que componen las comisiones por considerar que esta medida supone trasladar a las comisiones "un escenario político que no se corresponde con las mayorías en el Pleno". Ayer mismo, el coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, reclamó mantener la "correlación de fuerzas" y las proporciones actuales.

Al final, las formaciones minoritarias han aceptado los cambios al ver garantizada la proporcionalidad en la Diputación Permanente y al entender que, en las comisiones parlamentarias era precisamente el grupo parlamentario de CC quien solía 'salvar' al PSOE en muchas votaciones. Sin embargo, el PP expresó su disconformidad recalcando que, en la Diputación Permanente, no llega al 42 por ciento que sí representa en el Pleno de la Cámara.

Así, el portavoz del Grupo Popular, Eduardo Zaplana, considera que su formación "sale claramente perjudicada", porque con esta nueva distribución "no se cumple la proporcionalidad, con independencia del apoyo que sea o no necesario para sumar mayorías". "Es lógico que las minorías se sientas satisfechas, pero no está bien que el PSOE rompa una norma tradicional y se cargue esa forma de comportamiento --aseveró-- Sientan unos precedentes para el futuro y la historia de España no acaba en esta legislatura".

Por contra, el PSOE replicó que es imposible trasladar literalmente la "proporcionalidad" a las comisiones y a la Diputación Permanente porque en los órganos de menor escala se prima a las formaciones minoritarias. "Es un acuerdo satisfactorio adoptado sin ningún voto en contra", enfatizó el portavoz del Grupo Socialista, Diego López Garrido, destacando que si alguien se beneficia es el PP, que necesitará sumar menos apoyos para empatar una votación.

Para Joan Herrera, portavoz de IU-ICV, el problema no es el arreglo acordado hoy, sino el problema "heredado" que suponía en ésta y en la anterior legislatura, con el PSOE y antes con el PP, que el presidente del Congreso forme parte de la mayoría tenga voto en la Diputación Permanente.

LOS 'EFECTOS SECUNDARIOS' DE LA FUGA DE RODRÍGUEZ.

Todos estos cambios vienen motivados por la disolución del grupo parlamentario de CC-NC provocada a su vez por la marcha al Grupo Mixto del líder de Nueva Canarias, Román Rodríguez, en protesta por la decisión de CC de pactar con el PP en el archipiélago. El Reglamento establece que, cuando un grupo queda con menos de la mitad del número mínimo de diputados que se requiere para formarlo, todos los integrantes van al Mixto y la formación parlamentaria se disuelve, y la marcha de Rodríguez dejó solos a los dos diputados de CC, que ya no llegaban a la mitad de cinco que se requería.

Los dos diputados de Coalición Canaria, Ana Oramas y Luis Mardones, recurrieron la disolución del grupo pero hoy se ha visto ratificada tanto en la Mesa de la Cámara como en la Junta de Portavoces, donde sólo el PP apoyó la petición de los nacionalistas canarios.