El conservador búlgaro ponente de los suplicatorios de Puigdemont y Comín en el PE lo será también del de Ponsatí

BRUSELAS 4 May. (EUROPA PRESS) -

El conservador búlgaro Angel Dzhambazki, del grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), será el eurodiputado encargado de redactar la posición del Parlamento Europeo sobre el suplicatorio del Tribunal Supremo para levantar la inmunidad a Clara Ponsatí, según ha decidido este lunes la comisión de Asuntos Jurídicos que ya le asignó en enero los expedientes del expresidente catalán Carles Puigdemont y del exconseller Toni Comín.

El reparto de los ponentes encargados de cada suplicatorio se realiza por turnos entre los distintos grupos parlamentarios y en esta ocasión la responsabilidad recae sobre un diputado que comparte grupo con la delegación de Vox, pero también con los nacionalistas flamencos de la N-VA, muy cercanos y simpatizantes de la causa independentista catalana.

La decisión que sea también el eurodiputado búlgaro quien se ocupe del expediente de Ponsatí ha sido tomada este lunes por los coordinadores de los distintos grupos políticos en la comisión de Asuntos Jurídicos de la Eurocámara, según han informado a Europa Press fuentes parlamentarias, que precisan que no se han dado otros avances en la tramitación de los suplicatorios.

Su tarea será la de redactar los informes que recomienden o no levantar la inmunidad europarlamentaria de los tres políticos independentistas, una posición que la comisión parlamentaria solo tomará después de escuchar a los tres eurodiputados afectados y tras debatir a puerta cerrada la cuestión. La posición definitiva de la Eurocámara debe ser votada en comisión y sesión plenaria.

Se trata de un proceso que lleva de media varios meses y que inicialmente se esperaba en torno al verano, pero que la nueva situación de confinamiento generada por el coronavirus ha obligado a poner en espera.

Los procedimientos sobre inmunidad parlamentaria son trámites sensibles con requisitos de confidencialidad y la condición de votación secreta que complican su tramitación en el contexto actual, en el que los eurodiputados se reúnen por videoconferencia y participan en las votaciones a través de correos electrónicos.