Desarticulada una organización internacional que explotaba sexualmente a mujeres rusas en Fuerteventura y Almería

Actualizado: jueves, 26 julio 2007 11:38

MADRID, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización internacional afincada en España y dedicada a la introducción de ciudadanas de origen ruso para su explotación sexual en clubs de Fuerteventura y Almería. Se estima que más de 300 mujeres podrían haber sido explotadas por esta organización, de la que han sido imputadas nueve personas, tres españoles y seis rusos.

Las jóvenes eran captadas en su país de origen con falsas promesas de trabajo en España en el mundo del espectáculo, concretamente en relación con el baile y la danza. Sin embargo, una vez convencidas e introducidas clandestinamente en España, eran trasladadas hasta la isla de Fuerteventura y a la provincia de Almería, coaccionadas y obligadas a ejercer la prostitución contra su voluntad.

Con las ganancias derivadas del ejercicio de esta actividad debían saldar la deuda que habían contraído con la organización por su viaje hasta nuestro país.

JÓVENES CON POCOS RECURSOS.

Los miembros de la red se encargaban de buscar a jóvenes en situación de gran dependencia económica y pocos familiares que pudiesen interesarse por su situación. El perfil de sus víctimas respondía a madres solteras o chicas huérfanas y provenientes de zonas económicamente deprimidas de Rusia.

Una de mujeres que logró denunciar los hechos, una joven huérfana que apenas contaba con 18 años cuando llegó a España en el año 2005, fue atleta olímpica y participó con Equipo Olímpico Ruso en Atenas 2004. Al poco de llegar a España y darse cuenta de que el trabajo que le habían prometido, relacionado con la danza, era totalmente falso, logró recuperar su documentación y escapar de los miembros de la organización.

Sin embargo, días más tarde fue localizada por componentes de la red, quienes la recluyeron en un apartamento del sur de la isla de Fuerteventura. Allí llegó a estar varios días sin alimento, siendo ayudada por unos vecinos que le facilitaban comida por una rendija de la habitación donde se encontraba.

Con ayuda de esos vecinos, la joven escapó de nuevo y denunció los hechos ante la Policía. Los datos que aportó fueron esenciales para la investigación y se sumaron a las denuncias de otras dos ciudadanas rusas.

El principal responsable de esta red en España, José Manuel R.V, huyó entonces a Rusia, donde ha permanecido oculto hasta ahora, aunque los beneficios económicos obtenidos por su actividad delictiva seguían llegándole hasta ese país. Cada mes recibía unos 10.000 euros procedentes de la explotación sexual, un dinero que le ha permitido mantener un alto tren de vida en Rusia.

MODUS OPERANDI

La organización disponía en Rusia de personas que realizaban funciones de "captadores" quienes convencían a mujeres jóvenes, en situación económica precaria y con pocos familiares que les pudieran ayudar. Para ello, utilizaban engaños y promesas de obtener un trabajo legal, digno y bien remunerado en España, más concretamente en las Islas Canarias.

Las víctimas, una vez conducidas y trasladadas a Fuerteventura y a la provincia de Almería, eran controladas por miembros de esta organización, impidiendo en todo momento su libertad. Las jóvenes eran también objeto de sanciones económicas en caso de que desobedecieran, lo que servía para alargar su deuda y perpetuarlas en la prostitución.

Los detenidos e imputados tras la desarticulación de esta organización internacional son José Manuel R. V., nacido en 1968 en Dalias (Almería); Marina G., nacida en 1977 en Tambor; Olga B., nacida en Rusia en 1980; José Antonio M. M., nacido en 1965 en Almería; Victoria D., nacida en 1973 en Almaata (Kazajistán); Yuliya V., nacida en 1977 en Rusia; Natalia M.; Maksym K., y Francisco G. V.. A lo largo de la investigación también se han tramitado 38 expedientes de expulsión por estancia irregular en España.