MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desarticulado una organización, asentada en Almería, dedicada al tráfico de armas y municiones en todo el territorio nacional, en una operación en la que ha detenido a 16 de sus integrantes, 13 de ellos en Almería, dos en Murcia y una en Tarragona.
En la denominada operación "Troya", en la que la Guardia Civil ha llevado a cabo varias actuaciones coordinadas las provincias de Almería, Murcia y Tarragona, se han efectuado diez registros en los que se han encontrado 45 armas, tanto cortas como largas, más de 1.200 cartuchos de diversos calibres y 15 cañones nuevos con los que la organización tenia previsto rehabilitar armas de armas de fuego inutilizadas, una de sus ocupaciones principales.
Asimismo, en los diferentes registros efectuados en viviendas y empresas de la trama, la Guardia Civil se ha incautado de un kilo y medio de pólvora, tres pagarés por valor de 11.500 euros, 1600 euros en metálico, material informático y diversa documentación, así como de diversas herramientas para la alteración y fabricación de las armas.
Además, este grupo delictivo se dedicaba a la transformación de armas detonadoras para que pudieran efectuar fuego real, que posteriormente ponía en circulación en el mercado negro para abastecer los círculos criminales a nivel nacional, para lo que contaba con una amplia infraestructura en la provincia de Almería y con la colaboración de un establecimiento público dedicado a la venta de armas y de una empresa de mecanizaciones, encargadas de facilitar la compra, rehabilitación y puesta en funcionamiento de las armas.
ROBOS CON FUERZA
Según el Ministerio del Interior, la operación ha permitido esclarecer varios hechos violentos, como robos con fuerza, que han tenido lugar en Almería, al determinar que las armas con las que fueron cometidos dichos delitos habían sido suministradas por la organización. La Guardia Civil continua investigando la posible relación entre la organización y los robos, tras encontrar en la incautación armas similares a las que se utilizaron para cometer los atracos.
Las armas distribuidas por la organización eran manipuladas artesanalmente por componentes de la organización, llegando incluso a confeccionar las municiones de diferentes calibres para las diferentes armas. Es por esto que la Guardia Civil se ha incautado de numerosos cartuchos elaborados de forma artesanal y un kilo y medio de pólvora, así como abundantes piezas y accesorios para armas de fuego y herramientas para la rehabilitación y manipulación de las armas.