MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desmantelado un grupo criminal que se dedicaba a estafar en las transacciones relacionadas con la compra de vehículos de importación de alta gama. La operación se ha desarrollado en Valencia y Madrid y se han localizado a 38 víctimas, a las que esta organización ha estafado más de 255.700 euros.
En un comunicado, la Guardia Civil ha explicado que, en el marco de esta operación, se han detenido a cuatro personas e investigado a otras tres de origen armenio y español por delitos de pertenencia a organización criminal, delitos de estafa, de apropiación indebida y falsedad documental.
La investigación se inició el pasado mes de septiembre a raíz de tres denuncias recibidas en el Cuartel de la Guardia Civil de Collado Villalba (Madrid) relacionadas con compras de vehículos de alta gama en las que los perjudicados manifestaron haber adelantado una señal de dinero en concepto de reserva de un vehículo, sin haber finalizado la compra.
Como consecuencia de estas denuncias la Guardia Civil consiguió identificar a una de las personas del grupo, descubriendo que los agentes del Área de Investigación de Cullera (Valencia) se encontraban investigando al mismo grupo delictivo.
PATRÓN DE ACTUACIÓN
Tal y como explican los investigadores, las víctimas accedían a través de internet hasta una empresa dedicada a la reparación de coches y que hacía ventas de vehículos de alta gama de importación alemana a un precio inferior al de la media.
A través de una persona de la organización se les facilitaba información comercial, preacuerdos y contratos ficticios con la condición de que hicieran ingresos de cantidades de dinero que oscilaban entre los 5.000 y los 15.000 euros y una vez que el grupo tenía en su poder el dinero, perdían el contacto con las víctimas.
A pesar de seguir un mismo patrón de actuación, los agentes de la Guardia Civil constataron que en tres de los casos, los investigados llegaron a ofrecer también altas inversiones en vehículos importados, exigiéndoles una alta cantidad que en alguna ocasión sobrepasó el doble de lo invertido, dando una apariencia real de ser un negocio seguro.
Asimismo, los investigadores comprobaron que el grupo criminal utilizaba una empresa pantalla dedicada a la reparación de vehículos que no tenía actividad real legal, y que era utilizada para realizar operaciones ilícitas y evitar ser detectados por la Agencia Tributaria.
38 VÍCTIMAS
La Guardia Civil ha localizado hasta el momento a 38 víctimas del grupo organizado en las provincias de Valencia, Castellón, Alicante, León, Gijón, Pontevedra y Madrid.
El registro de 3 domicilios y un establecimiento comercial regentado por personal de la organización en Cullera permitieron a la Guardia Civil intervenir contratos fraudulentos de compra y venta de vehículos, recibos bancarios de transferencias fraudulentas, dos armas de fogueo cortas y pasamontañas.
En paralelo se produjo la detención de las cuatro personas que formaban esta organización. Otras tres personas están siendo investigadas por colaborar con el grupo buscando nuevos inversores o compradores y desviando y ocultando el dinero a través de la red de clientes.
