TOLEDO, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano, asegura que no hay ninguna orden de detener inmigrantes por cupo en la región, pero sí una instrucción "para perseguir a las redes y mafias que trafican con seres humanos y que se aprovechan de la miseria de trabajadores extranjeros en situación de ilegalidad". Por otra parte, dice estar convencido de que "no existe relación" entre la crisis económica actual y el incremento de la delincuencia, sino más bien entre criminalidad y el desarrollo experimentado por la región en los últimos años y la mejora de las infraestructuras para el transporte y de las comunicaciones.
"La explicación hay que buscarla más en esa dirección" y en los crecimientos de Guadalajara y Toledo, de los más altos de España, a pesar de lo cual, subrayó, "hay que añadir que seguimos estando muy por debajo de la media nacional en la tasa de criminalidad que se mide por número de infracciones penales por cada mil habitantes", con una ratio más de diez puntos por debajo de la media nacional.
En una entrevista concedida a Europa Press, Díaz-Cano agregó que esta región "es una región razonablemente segura" y, en este sentido, adelantó que la tendencia en los primeros meses del año 2009 desde el punto de vista de la evolución de la delincuencia, es la del descenso, también a nivel provincial, y con caracter general.
Destacó, entre las causas de este descenso de la criminalidad, el trabajo de los profesionales de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "que es bastante eficaz", teniendo en cuenta el número de detenidos y el de esclarecimiento de infracciones penales.
En cuanto a las críticas del PP por el hecho de que se pudieran estar ocultando datos sobre criminalidad, el delegado del Gobierno en la región aseveró que "no hay ningún intento de ocultamiento porque sería absurdo". "Sería una torpeza engañarse a uno mismo sobre cuál es la realidad", apostilló.
Aquí recordó que "por primera vez tenemos datos que podemos mostrar que son fiables" pues antes "había criterios distintos y ha podido suceder que en algún momento las interpretaciones de la realidad no se reflejaban en la realidad de los datos". Según Díaz-Cano ahora "no solo no hay intento de ocultación sino que se dan los datos y se hace una estadística bastante buena y rigurosa con los mismos parámetros para todo el mundo".
COORDINACIÓN INTERTERRITORIAL
De otro lado, avanzó que a la reciente incorporación de 179 nuevos guardias civiles a la Comunidad Autónoma, se unirá la llegada de nuevos efectivos de Policía Nacional, ya que se tiene que incorporar la gente que ha participado en concursos de traslado para cubrir las vacantes que existían en la Comunidad Autónoma.
El delegado del Gobierno señaló que los efectivos de la Policía Nacional han aumentado en 99 entre 2003 y 2008, mientras que en la Guardia Civil se ha pasado de 4.052 a los casi 5.000 tras la llegada de esos 179 últimos, lo que contrasta con los datos del periodo 1996-2003, cuando el número de efectivos disminuyó.
"A todos nos gustaría que el incremento fuese mayor, pero los escenarios presupuestarios son los que son", agregó Díaz-Cano a continuación, recordando que, a pesar de las críticas del PP en este ámbito, el nivel de cobertura de los catálogos supera el 90 por ciento en Castilla-La Mancha.
Además, continuó, a eso hay que añadir que existe una "razonable buena coordinación con los efectivos de otras comunidades autónomas", que hay que mejorar y, para ello, se producen reuniones periódicas "para evitar que la presión en un territorio lleve como consecuencia el aumento de la delincuencia en esa zona".
DISCURSO PELIGROSO
Por otra parte, Máximo Díaz-Cano negó que por parte del Ministerio del Interior ni por la suya propia haya habido alguna orden para 'cazar' inmigrantes en la región. "No niego que en algún momento determinado alguien ha podido realizar una asignación en el trabajo policial de un cupo", aseveró, pero añadió que "eso es un error y no se puede plantear el trabajo desde esa perspectiva".
Lo que sí hay, reconoció, es "una instrucción" de la Delegación del Gobierno "para perseguir a las redes y mafias que trafican con seres humanos y que se aprovechan de la miseria de trabajadores extranjeros en situación de ilegalidad", algo que se hace especialmente cuando llegan las campañas agrícolas.
Destacó que el porcentaje de detenidos es "más o menos el mismo o similar al que hay de población inmigrante en relación a la población nacional", y advirtió de que, en cualquier caso, "ese discurso es muy peligroso" porque "alguien puede hacer interpretaciones no adecuadas respecto a la convivencia" y "un delincuente es un delincuente, me da igual que sea de un país o sea de otro. Aquí se trata a los delincuentes con el mismo rasero".
Finalmente, y preguntado por la campaña agrícola de 2009, el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha subrayó que el escenario de 2009 es distinto al anterior por la crisis económica y el incremento del desempleo y la posibilidad de que los trabajadores españoles tienen disponibilidad para poder ser contratados, no siendo necesario ir al extranjero a contratar; y por la desaparición de la moratoria, lo que facilita la gestión de la contratación.
Máximo Díaz-Cano, que confió en conseguir el "nivel de legalidad" que se logró el año pasado, avanzó que desde la Delegación ya se está trabajando "para que no se produzcan problemas" en ninguna de las campañas.
"Tenemos que intentar que no se produzcan situaciones como las que se produjeron en la campaña de la aceituna de Andalucía, donde cuando los nacionales se incorporan otra vez, tras años de estar ausentes, que haya miles y miles de ciudadanos extranjeros vagando por las calles sin trabajo".
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