MADRID, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran, consideró que en Catalunya "hay mucha desorientación" que favorece a los independentismos, pero defendió que "esa no es la vía" y advirtió de que se trata de un camino que "lo único que va aportar es frustración".
En una entrevista publicada hoy en 'Lecturas para el debate' y recogida por Europa Press, Duran señaló que en Catalunya "hay mucha desorientación" en la que, a su juicio, "la caña de los independentistas pesca más". "Puede sacar algún pescado más pero mi obligación es convencer a los ciudadanos de que la independencia no es la vía para Catalunya", precisó.
En este sentido, argumentó además que el hecho de que haya más votos independentistas no significa que haya más personas independentistas. "Hay desorientación política y eso afecta al nacionalismo, pero eso no significa que haya más votos independentistas", insistió tras recordar que en la comunidad sí que existe un sentimiento "de indignación" por una sensación de "falta de atención" del Estado.
Además, advirtió de que se trata de un camino que "lo único que va a aportar es frustración", algo que considera "lo peor" que le puede ocurrir a "un pueblo" como Catalunya "sin estructuras de Estado". "No tengo que volverme independentista porque las encuestas digan que es la tónica --continuó--. Mi tarea es hacer ver a esos ciudadanos que ese no es el camino".
DEBATE DEL ESTATUT A LA LIGERA.
Duran hizo también referencia al Estatut de Catalunya y descartó que su "generación" pueda acometer otra reforma, aunque reconoció que "en el tema autonómico se podrían haber hecho las cosas mejor". Además, recordó que todavía están pendientes los recursos presentados ante el Tribunal Constitucional (TC), en el que aseguró confiar en su "independencia de criterio".
Respecto al papel del jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, en la tramitación de la reforma, lamentó que no sea un dirigente "todo lo consistente" que él desearía para un presidente del Gobierno. A su juicio, Zapatero se tomó "muy a la ligera" el debate del Estatut, lo que contribuyó a generar una sensación de "frustración" de Catalunya frente a España y, al mismo tiempo, "de debilidad de los nacionalistas".
Además, emplazó a revisar los conceptos clásicos de soberanía porque "los Estados no son soberanos". "Debemos superar el modelo soberanista de los Estados --continuó--. Esto quiere decir que el encaje de Catalunya en España pasa por el pacto y el acuerdo, y no por la segregación ni la secesión y pasa, por supuesto, porque España reconozca que en su seno alberga diferentes culturas, diferentes lenguas y diferentes sentimientos nacionales, pero pasa también porque en Catalunya reconozcamos también el sentimiento de España como nación".
PONER SENTIDO COMÚN A LA POLÍTICA ESPAÑOLA.
El candidato de CiU a la Presidencia del Gobierno realizó además un repaso de la situación política nacional y criticó que en este momento los grandes partidos "son incapaces" de ponerse de acuerdo "para nada de importancia" en ninguno de los intereses del Estado. A su juicio, ahora son "más necesarios que nunca" los políticos moderados, centrados y mesurados para "ver si es posible poner un poco de sentido común a la política española".
Según argumentó, "con estos mimbres políticos y con estos discursos" no sería posible la Transición, una época que considera "la mejor lección del pasado en España". "La Transición ha sido un periodo ideal", afirmó para reconocer a continuación que el país está pasando el periodo "más brillante de acuerdo político, de garantías democráticas, libertad, de autogobierno y desarrollo económico y social de su historia".
Respecto a las próximas elecciones generales, Duran consideró que tanto PSOE como PP acometerán un proceso de elección de nuevo líder si pierden, algo que puede contribuir a que "las cosas vayan a mejor". "Será muy importante ver quién es el nuevo dirigente para ver si es capaz de de sentar las nuevas bases políticas desde una realidad política distinta", apostilló.
En su opinión, sería además muy importante que ninguno de los partidos gane con mayoría absoluta de manera que CiU pudiese tener un mayor papel, algo que, a su juicio, "sería bueno para Catalunya y para España". Según indicó, los mejores momentos del país han sido cuando CiU "ha estado por medio, conciliando y atemperando, moderando las posiciones de unos y de otros".
Respecto a su visión de los partidos, defendió que "el PP de hoy" no es "dialogante", igual que, a su juicio, no lo fue durante el segundo gobierno de José María Aznar. En el otro extremo se encuentra el PSOE que, según enfatizó, es "tan dialogante que no es creíble". "Ese diálogo que mantiene conmigo lo mantiene con otros tres y nos dice a todos lo mismo con posiciones contrarias", criticó.
