La Ejecutiva socialista define hoy la política de pactos en Navarra, sin la presencia de Zapatero que visitará Parla

Actualizado: viernes, 3 agosto 2007 10:39

MADRID, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -

La reunión que mantiene hoy la Ejecutiva Federal del PSOE con la dirección del PSN será crucial para despejar, más de dos meses después de las elecciones forales, las dudas sobre la gobernabilidad de Navarra. Será un encuentro al que no acuda el secretario general de los socialistas, José Luis Rodríguez Zapatero, quien primero acudirá a la reunión del Consejo de Ministros y después realizará una visita a Parla, invitado por su alcalde, Tomás Gómez.

La dirección del PSOE, a quien le corresponde la decisión última en materia de pactos, es reacia al pacto con Nafarroa Bai, incluido Zapatero, y prefiere un gobierno de UPN en minoría. Miembros de la Ejecutiva Federal avanzaron a Europa Press que, a no ser que hayan cambiado las condiciones expuestas a mediados de julio, no podrá autorizar un pacto con nacionalistas vascos, que ve perjudicial para afrontar las elecciones generales del próximo año, dado el que PP podría aprovecharlo para hacer oposición.

No obstante, los órganos del PSN han sido claros en cuanto a sus preferencias. Puras dio preferencia a las conversaciones con la coalición nacionalista tras las elecciones, a las que el PSN, concurrió con el lema "En Navarra, tú decides" cuando PSOE y PP se enfrentaban por la acusación de los populares a los socialistas de una posible "venta" de la Comunidad foral a la banda terrorista ETA.

El 4 de julio, el comité regional se posicionó, por 104 votos a favor y uno en contra, a favor del acuerdo con Nafarroa Bai e IUN y el pasado miércoles, tanto la Ejecutiva como el grupo parlamentario lo ratificaron, expresando su confianza en que la dirección del PSOE la avale.

El PSN sabe que la dirección del partido no va a dar facilidades pero pone por delante la decisión unánime de las bases y de la dirección del partido, que, de verse contrariada, podría crear una nueva crisis en una federación que sufre todavía los efectos del procesamiento y detención de varios dirigentes por corrupción, entre ellos Gabriel Urralburu, ex presidente del Gobierno foral.