Cree que su manifiesto establece las bases para un acuerdo y destaca la importancia del papel de las mujeres en conflictos mundiales
BILBAO, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Escuela de Cultura de Paz de la Universidad Autónoma de Barcelona -uno de cuyos principales cometidos es el seguimiento, análisis y actuación en los procesos de paz, "sea en conflictos armados o en conflictos que no están fase bélica pero que todavía no están resueltos"- ha expresado su respaldo a Ahotsak y ha realizado un llamamiento a fortalecer las iniciativas civiles y sociales. Además, cree que el manifiesto de constitución de este colectivo establece las bases para un acuerdo de mínimos en una mesa de partidos y destaca el papel de las mujeres en los conflictos de todo el mundo.
En un comunicado, la Escuela de Cultura de Paz realiza una reflexión "ante la situación de tensión que se vive actualmente" tras el atentado de Barajas, "que ha afectado profundamente al intento de llevar a cabo un proceso de paz en el País Vasco".
"Ante la ausencia de condiciones y serenidad para que a corto plazo puedan producirse medidas que conduzcan a una pronta finalización del conflicto y, a partir de nuestra experiencia de analizar todos los procesos de negociación que existen en el mundo y de contrastar opiniones con numerosas personas que facilitan procesos de paz en diferentes continentes, queremos manifestar la extrema importancia que tiene, en estos momentos, fortalecer las iniciativas civiles, sociales, culturales o políticas que intentan establecer y mantener lazos de comunicación entre personas de diferentes sensibilidades políticas", subraya.
Por ello, considera esencial mantener estas relaciones entre las personas que, aun perteneciendo a diferentes sensibilidades, "están unidas por el deseo de ver finalizada cualquier expresión de violencia y por la convicción de que la paz y la reconciliación sólo será posible mediante el diálogo continuo, el respeto a la diferencia, la defensa de todos los derechos humanos, el rechazo a las violencias y el fortalecimiento de un sistema democrático que sea capaz de responder a las demandas de la ciudadanía".
A su juicio, "en la práctica totalidad de los conflictos que actualmente están teniendo lugar en el mundo y en los que ya han sido resueltos por vías pacíficas y dialogadas, las mujeres han hecho propuestas y han liderado y protagonizado iniciativas encaminadas a fortalecer estos procesos".
"En muchos de estos contextos han sido mujeres pertenecientes a comunidades enfrentadas en sociedades polarizadas quienes han alzado sus voces para tender puentes de diálogo y comunicación. Así lo ha recogido Ahotsak en su manifiesto fundacional al señalar que, 'partiendo desde lo que nos une y desde lo que nos separa, queremos explorar pasos hacia delante en la búsqueda de la paz y de la reconciliación'", añade.
IRLANDA DEL NORTE
En esta línea, recuerda que, "en Irlanda del Norte, las mujeres unionistas y republicanas fundaron de manera conjunta el partido político Northern Ireland Women's Coalition, con el que concurrieron a las urnas y participaron en el proceso de negociación, demostrando que era posible llevar a cabo un proceso de carácter inclusivo y convirtiéndose en la demostración palpable de que el trabajo conjunto de las comunidades enfrentadas era posible". "La creación de este partido cristalizaba los esfuerzos por la paz de organizaciones de la sociedad civil mixtas durante el transcurso del conflicto", señala.
Asimismo, indica que "mujeres israelíes y palestinas, unidas en torno al colectivo de Mujeres de Negro, han trabajado de manera conjunta, denunciando el gravísimo impacto que sobre la población civil está teniendo el conflicto armado en esta región, así como las violaciones de derechos humanos que se están cometiendo". "Además, ha sido creada la Comisión Internacional de Mujeres para una Paz israelí-palestina, auspiciada por Naciones Unidas e integrada por delegaciones de alto nivel de ambos países", apunta.
También destaca que, "en el proceso de negociación de Sri Lanka, mujeres representantes del Gobierno y del grupo armado de oposición integraron el comité de género en las negociaciones de paz, con la facilitación de Noruega y acordando una agenda común de negociación a pesar de las diferencias políticas, étnicas, culturales, lingüísticas y religiosas".
La Escuela de Cultura de la Paz de Barcelona se refiere también al conflicto de Los Balcanes, donde "mujeres de todos los territorios que conformaban la ex Yugoslavia se unieron también en torno a Mujeres de Negro para pedir el fin de la guerra y del genocidio". "En otros muchos países del continente africano, devastados por la guerra, las mujeres se han implicado de manera directa en la construcción de la paz", subraya.
AHOTSAK
Por todo ello, considera que "los presupuestos expuestos por Ahotsak forman parte también de la Resolución 1325 del Consejo de Seguridad de la ONU, en la que se reconoce el importante papel que desempeñan las mujeres en la prevención y solución de los conflictos y en la consolidación de la paz, y en la que se subraya la importancia de que las mujeres participen en pie de igualdad en los procesos de paz".
En esta línea, da "especial el valor" a la iniciativa de las mujeres vascas "unidas en torno al colectivo Ahotsak, voces de mujeres para la paz, cuyo manifiesto inicial del 8 de abril de 2006 establece las bases para un acuerdo de mínimos que ya debería haberse superado en la proyectada, pero inexistente, mesa de partidos".
"Animamos al colectivo Ahotsak a que continúe trabajando para lograr un acuerdo que sirva de cimiento para un futuro proceso de diálogo y búsqueda de consensos en el interior de la sociedad vasca, con o sin la existencia de ETA", concluye.
