MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno manifestó este miércoles su "grave preocupación" por que las autoridades israelíes de Jerusalén hayan autorizado la construcción de 900 viviendas en un asentamiento en Jerusalén Este y pidió que se cumpla lo establecido en la 'Hoja de Ruta'.
Tanto España como la Unión Europea "han afirmado con toda claridad que los asentamientos son contrarios al derecho internacional", recordó el Gobierno a través de un comunicado emitido por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
"La comunidad internacional ha reiterado a las autoridades israelíes la necesidad de abstenerse de cualquier acción que pueda prejuzgar aquellas cuestiones que, como el estatuto de la ciudad de Jerusalén, han de formar parte de la solución final del conflicto", dice la nota.
España pidió "que se evite cualquier paso que incremente la tensión entre israelíes y palestinos, y que se cumplan las obligaciones estipuladas en la Hoja de Ruta", que estipula el cese de todas las actividades en los asentamientos.
Asimismo, España instó a las partes a que "reanuden a la mayor brevedad los contactos y negociaciones que permitan la solución del conflicto sobre la base de la fórmula de los dos Estados, Israel y Palestina, viviendo uno junto a otro en paz y en seguridad".
