Avisa que no caben "pactos políticos" ni "derechos históricos" ni senyeras frente a la exigencia de respeto a la Constitución
MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ex secretario general del PSM y diputado por Madrid Rafael Simancas considera que el PSC --igual que CiU-- ha caído en la "sobreactuación" al valorar la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el 'Estatut', y que el presidente catalán, José Montilla, no ha mostrado "una actitud propia de quien preside un gobierno en un Estado de Derecho", al llamar "a la movilización ciudadana contra una sentencia".
Simancas avisa de que en un Estado constitucional "todas las leyes, todas, deben ajustarse a la Carta Magna". "Y frente a esta exigencia primigenia, no caben ni 'pactos políticos', ni 'derechos históricos', ni referéndums de una parte de la ciudadanía, ni senyeras, ni manifestaciones", advierte, en un artículo en la web de la Fundación Sistema --que preside Alfonso Guerra-- recogido por Europa Press.
Así, tacha de "original teoría" el contraponer a la sentencia "el pacto político" y la "decisión de la nación catalana" y advierte de que "todos" conocían las reglas del juego desde antes de iniciar la reforma del 'Estatut'. "Sólo cabe el acatamiento y el respeto a las reglas del juego", insiste y añade que, las críticas, "propias de una sociedad libre", deberían enmarcarse en el sentido común.
Simancas opina que el Constitucional ha aprobado "una sentencia sensata, como cabía esperar", sobre el Estatuto catalán, mientras que "la respuesta de la mayor parte de los políticos catalanes ha sido insensata, como también podía esperarse lamentablemente".
El ex dirigente madrileño ve "desaforada" e "histriónica" la reacción catalana, y dice no entender "la deriva independentista de ERC" (que no apoyó el 'Estatut', recuerda), ni "la rebeldía institucional de ICV" --ambos partidos forman parte del Gobierno--; pero tampoco la "sobreactuación" de PSC y de CiU. "No se entiende ni en la forma ni en el fondo", sentencia.
A CiU le reprocha especialmente que hable de "engaño ético" y "humillación colectiva" y se pregunta "a qué viene" tanta descalificación y si los políticos catalanes esperan recabar un voto "directamente proporcional al grosor de las diatribas contra el Estado".
BASTA DE "DISQUISICIONES FLORENTINAS"
Bien al contrario, Simancas está convencido de que "la gran mayoría" de los ciudadanos aprecia "la identidad propia" y el "autogobierno eficiente", pero sobre todo quiere políticos centrados en resolver "problemas reales" y no "absurdas disquisiciones florentinas".
Pero además, critica también los "aspavientos triunfalistas" del PP porque "su derrota política es evidente", después de haber jugado a instrumentalizar el Estatuto "para movilizar a lo más rancio de la sociedad bajo el grito de España se rompe".
Simancas recupera la comparación de la sociedad catalana con una " botella de refresco efervescente" que se ha ido agitando "entre todos", de manera que ahora es "inevitable que se derrame algo de espuma". Y aunque espera que "la efervescencia acabe cuanto antes", expresa su temor a que "tanta espuma y artificial fomentando el victimismo y la confrontación con España acabe resultando tóxica para todos".
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