MADRID, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Fomento, José Blanco, ha lamentado que algunos dirigentes políticos estén intentando debilitar la posición de "fortaleza" del Gobierno frente a la banda terrorista ETA y ha asegurado que las puertas de diálogo quedaron "sepultadas" desde el día en que la organización retomó la violencia.
En declaraciones a Telecinco, recogidas por Europa Press, Blanco ha aseverado que el comunicado de ETA, en el que anuncia el cese de las acciones armadas, surge como consecuencia de su propia "debilidad" y "no" de un posible diálogo con el Ejecutivo central.
"No hubo ninguna vía de diálogo, esto surge como consecuencia de la debilidad de la propia ETA, de la fortaleza del Estado de Derecho, de la determinación de la Justicia, de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de la voluntad de todas las fuerzas políticas democráticas de trabajar en la misma dirección", ha enfatizado.
Dicho esto, ha criticado que haya quienes estén "insinuando" que puede pasar algo "entre bambalinas" aunque se ha mostrado partidario de quedarse con la opinión del líder del PP, Mariano Rajoy, del PNV y de CiU porque, según ha argumentado, "comparten la estrategia, el objetivo y la determinación" del Gobierno frente a ETA.
Así, el ministro ha dejado "claro" a la izquierda abertzale que para participar en las instituciones debe "romper" con ETA, "condenar" el terrorismo y "participar de la vía democrática" de acuerdo a lo establecido en la Ley de Partidos. "No habrá hoja de ruta porque no va a haber negociación", ha concluido.
