MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El fiscal de la Audiencia Nacional Ignacio Gordillo pidió hoy a la Sección Cuarta de lo Penal una condena de 3 años de prisión para Igor Álvarez Zubeldia, Aritz Lasa Mendiaraz e Idoia Laburu Lejarreta, al considerar acreditado que participaron en febrero de 2002 en la quema de dos cajeros automáticos en San Sebastián.
En la sesión, el representante del Ministerio Fiscal elevó a definitivas sus conclusiones provisionales, en las que acusa a los jóvenes de un delito de daños terroristas. Además, solicitó a la Sala que les condene a indemnizar 41.399 euros, en concepto de responsabilidad civil, a la entidad bancaria afectada por los destrozos.
Durante su informe, Gordillo sostuvo que hay pruebas suficientes que demuestran que los jóvenes se dirigieron el 6 de febrero de 2002 a una entidad de la Kutxa, en la Avenida de Madrid de San Sebastián, donde tras rociar dos cajeros con líquido combustible inflamable, los prendieron fuego.
El fiscal sustentó su petición de pena en la declaración policial que prestó Álvarez tras ser detenido en octubre de 2005 en la capital guipuzcoana, en la que reconoció su participación en los hechos juzgados e implicó a los otros dos jóvenes acusados.
INDICIOS CONTRA ÁLVAREZ.
En su declaración ante el tribunal, Álvarez manifestó que las manifestaciones policiales fueron inducidas por la Guardia Civil, por lo que negó que por aquellas fechas hubiera participado en actos de kale borroka, al igual que hicieron Lasa y Laburu.
Frente a las argumentaciones de Álvarez, varios guardias civiles que comparecieron en la vista oral señalaron que Igor estaba siendo vigilado durante meses anteriores a su detención, ya que había indicios para "sospechar" que participaba en actos de violencia callejera.
De hecho, según relataron, la Guardia Civil le detuvo en las calles del casco viejo de Donosti al poco tiempo de haber participado en una algarada que se formó tras ser disuelta una manifestación a favor de un etarra que se había suicidado en prisión.
