MADRID 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
El fiscal de la Audiencia Nacional Jesús Alonso mantuvo hoy su petición de entre siete y diez años de cárcel para 13 acusados de pertenecer o colaborar con los subaparatos de captación e información de la organización terrorista ETA tras aparecer sus nombres en los papeles incautados en diciembre de 2003 al ex jefe militar Ibon Fernández de Iradi, 'Susper'.
En la última jornada del juicio, que quedará visto para sentencia esta tarde, el representante del Ministerio Público reclamó a la Sección Tercera de la Sala de lo Penal que condene a los acusados y las defensas reclamaron su libre absolución argumentando que sus representados nunca colaboraron ni formaron parte de la banda terrorista.
Los acusados se sientan en el banquillo por trabajar como presuntos captadores de nuevos miembros de la banda ('pescadores' o 'arrantzales' en el argot interno) e informadores que habrían recogido datos sobre posibles objetivos ('pianistas'). Cuatro de ellos se enfrentan a un delito de integración en organización terrorista y el resto están procesados por colaboración.
ACTUACIÓN EN CUATRO PROVINCIAS
El Ministerio Público enmarca la actuación de los acusados Ikerne Indacoechea y Ramón López Cid en la comunidad foral de Navarra. A la primera atribuye labores de captación de personas afines a ETA desde al menos 2001 y al segundo la realización de tareas de información como captado por el sub-aparato.
En relación con las actividades de captación en Guipúzcoa se encuentran procesados Regina Maiztegui --encargada de dar nombre de personas captables y trasmitir mensajes de ETA--, Mikel Garaiondo, Zugaitz Izaguirre, Maider Eguiguren, Carlos Moisés Martín y Alberto González.
Por su parte, el acusado Gorka Iriarte habría desarrollado su actividad en Álava mientras que Galder Bilbao, Iker Casanova, Arantza Martín y Francisco Javier Gil se habrían ocupado de las labores de captación en Vizcaya.
Todos ellos se negaron a responder a las preguntas formuladas por el fiscal Jesús Alonso y la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que ejerce la acusación popular, rechazaron las acusaciones que se les imputan y dijeron que admitieron los hechos ante la policía y el juez porque habían sufrido "presiones y malos tratos".
CONTACTOS CON 'SUSPER'
Durante el juicio, Regina Maiztegui indicó que 'Susper' trató de captarla para la organización pero aseguró que ella se negó porque estaba "cagada". También reconoció que otra de las acusadas, Maider Eguiguren, le entregó una carta del ex jefe de ETA para que colaborara con la banda. "Ibon se dirige a mí pidiendo colaboración pero, según pasa al tiempo, me doy cuenta de que no puedo seguir adelante en un tema de estos porque se me hace muy grande", relató.
También admitió que puso en contacto a 'Susper' con Ángel Murgoitio y Julen Eregaña, que sí aceptaron integrarse en la banda terrorista y, de hecho, fueron detenidos en octubre de 2001 como presuntos miembros del 'comando Aramba'.
Según el fiscal, Maiztegui habría aportado el nombre del también acusado Mikel Garaiondo. Éste admitió durante la vista que mantuvo un encuentro con el ex jefe etarra en un bar de Eibar (Guipúzcoa) aunque aseguró que no aceptó su propuesta ni le facilitó nombres de otros posibles colaboradores.
Eguiguren, por su parte, admitió haberle dado la carta de captación a Maiztegui pero aseguró que lo hizo por encargo de su novio, que trabajaba en el departamento de Urbanismo del Ayuntamiento de Azpeitia (Guipúzcoa). No obstante, se negó a facilitar su nombre cuando el presidente del tribunal, Alfonso Guevara, se lo preguntó. "Y esa persona, que llamaremos X, ¿pertenecía a ETA?", le siguió cuestionando el juez. "No lo sé, no quiero responder", respondió la acusada.