ETA.- La Fiscalía rebaja a 23 años la petición de pena a Santesteban Goicochea

MADRID 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

La fiscal de la Audiencia Nacional Dolores Delgado rebajó hoy la petición de pena al etarra Ignacio Pedro Santesteban Goicochea tres años por no considerar probado que el acusado participase en el robo de un vehículo y el cambio de placas de matrícula del mismo en febrero de 1992, aunque mantuvo la petición de siete años por pertenencia a banda armada, al que agregó subsidiariamente el de colaboración con banda armada, ocho por tenencia de explosivos y otros ocho por depósito de armas de guerra.

Según la representante del Ministerio Público, una huella encontrada en la parte adhesiva de la cinta que cerraba el explosivo, correspondiente a Santesteban, es prueba suficiente para demostrar su participación en los hechos. En concreto, ayudar a cargar un vehículo que intentó transportar explosivos de San Sebastián hasta Madrid en marzo de 1992. En ese mismo envoltorio se encontraron dos huellas dactilares de Gabriel Zabala, ya condenado por esos mismos hechos.

Por su parte, la defensa, solicitó durante el juicio la absolución alegando que fue condenado en Francia tanto en 1997 como en 2003 por asociación de malhechores, equiparable a pertenencia a banda armada en España, un delito que, a su juicio, es "permanente". Asímismo, considera que no hay pruebas que demuestren que su defendido haya depositado armas y, en relación con los explosivos, subrayó que en Francia también fue condenado por este delito.

La abogada defensora recalcó que el depósito de explosivos hallado en la vivienda de Santesteban en Francia es un lugar y creado para un mismo fin, por lo que, aunque los elementos que allí se fabricaban se fuesen utilizando, se considera un delito ya juzgado.

CONICIDO COMO 'EINSTEIN'

Santesteban reconoció su pertenencia a la organización terrorista ETA desde 1985 hasta el año 2000, que fue detenido en Francia. A preguntas de su abogada, explicó que huyó al país vecino después ser identificado como miembro de la banda y se estableció en la localidad francesa de Ziburu, donde formó parte del aparato electrónico de la organización. Por sus conocimientos y habilidades con la electrónica, fue conocido con el sobrenombre de 'Einstein'.

Según el relato del acusado, respaldado por las declaraciones de su mujer y su entonces jefe logístico, Joseba Agirre, no salió de Francia "en ningún momento" y, de hecho, abandonó su casa en "casos muy puntuales", como una visita de ocho días con su compañera a Futuroscope y un viaje a París para realizar compras relacionadas con su labor.

En la vista oral, declararon dos etarras condenados por esos mismos hechos, Gonzalo Rodríguez Cordero y Gabriel Zabala, que explicaron que actuaron solos y que no conocieron al acusado hasta su ingreso en prisión en España.

La fiscal aseguró que el hecho de que en el mismo envoltorio aparecisen huellas del acusado y de Zabala, prueba que Santesteban no estuvo siempre en Francia, ya que Zabala negó tajantemente haber cruzado la frontera. En este sentido, la defensa ironizó con que es "ir demasiado allá de las lógicas de la razón" el decir que "los siete juntos" de los que se hayaron huellas en el envoltorio de los explosivos, envolvieron los paquetes porque "los peritos no han dicho que en el mismo trozo aparezcan las siete huellas".