ETA.- IU califica de "accidente" la violencia de este fin de semana en Euskadi y la ve compatible con el diálogo

MADRID 28 May. (EUROPA PRESS) -

El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, reaccionó hoy a los últimos episodios de violencia ocurridos este fin de semana en el País Vasco y los calificó de "accidentes" que, en caso de no generalizarse, no son incompatibles con el inicio de un diálogo con la banda terrorista ETA.

En declaraciones a Europa Press, Llamazares indicó que en cualquier proceso como el iniciado tras el alto el fuego permanente de ETA "hay accidentes en el camino" y que "en tanto sean hechos aislados y menores no son incompatibles con el diálogo y la negociación".

Llamazares contestaba así al ser preguntado por las amenazas ayer contra el concejal de Ezker Batua Aitor Lafuente pintadas en la fachada principal de la sede de EB en Getxo (Vizcaya), en una jornada en la que también las juventudes de Segi colocaron en la misma localidad una pancarta amenazante contra el diario 'El Mundo', dos empresas de trabajo temporal en Irún fueron atacadas (la Ertzaintza investiga si se trata de kale borroka), y un grupo de personas lanzó piedras y botellas contra una furgoneta de la Ertzaintza en el casco viejo de Bilbao y huevos contra un 'batzoki'.

No obstante, Llamazares advirtió de que si este tipo de acciones violentas "se generalizara y se convirtiese en una estrategia de chantaje y de presión sobre los ciudadanos y las fuerzas políticas democráticas, pues sí sería un obstáculo". "Hoy por hoy es más importante el objetivo que los ruidos o zancadillas que pueda haber en el camino", remarcó.

Al ser cuestionado por la ampliación de la imputación del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska a ocho miembros de Batasuna por un presunto delito de amenazas terroristas, consideró que en ocasiones, ante "sobreactuaciones del propio mundo de Batasuna siempre hay también la tentación de sobreactuar por parte de otros poderes del Estado o la tentación de responder con la misma moneda", algo que, según él, supone "una equivocación".

"La mejor forma de responder a esas amenazas o chantajes es que cada uno cumpla con su cometido y que lo haga en un contexto de un proceso de paz abierto" y "sin sobreactuar", apuntó. En el caso del poder judicial, pidió que no se actúe como "justiciero".