MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -
El representante de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) en la Mesa por el Agua, Francisco Caña, dijo hoy que "es evidente" que la polémica de los espionajes en el seno del Gobierno regional tiene "mucho que ver" con la privatización del Canal de Isabel II.
Caña explicó que se trata de un paso más en la lucha "fraticida" que hay en el seno de la Comunidad de Madrid por el patrimonio del Canal. "Estamos hablando de quién reparte la tarta y a quién", agregó.
En el mismo sentido, recordó que el presidente del Canal, Ignacio González es el responsable de que se vaya a "convertir en un negocio un bien social".
Además, culpó a la presidenta del Gobierno regional, Esperanza Aguirre, de aprobar "con nocturnidad y alevosía" la ley que permitirá llevar a cabo la venta del 49 por ciento del Canal, sin abrir el debate a los grupos políticos y a la ciudadanía. Por ello, le pidió que ponga "todos los papeles de lo que se va a hacer encima de la mesa".
Asimismo, señaló que el Ministerio de Medio Ambiente se ha comprometido a aportar "el dinero que haga falta" para mejorar y ampliar las infraestructuras hidráulicas en la región y ha garantizado el abastecimiento de agua para una población de ocho millones de habitantes hasta dentro de seis años. Por ello, explicó que la privatización del Canal es una operación "especulativa". "Se está tratando de robar a los madrileños", apostilló.
Por último, hizo un llamamiento a los vecinos de los ayuntamientos de la región para que "tomen las medidas necesarias" para que no se enajenen un bien que es de todos".
