Fiscal y acusación mantienen su petición de 14 años para el alguacil de Villalón (Valladolid) por agresión sexual

Actualizado: miércoles, 28 noviembre 2007 18:09

VALLADOLID, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio Fiscal y la acusación particular elevaron hoy a definitiva su coincidente petición de 14 años de cárcel para el alguacil de Villalón de Campos (Valladolid) M.G.A. como autor de dos delitos de agresión sexual, otro de acoso sexual y una falta de amenazas sobre una empleada del servicio de limpieza del Consistorio, M.L.S.P, de nacionalidad portuguesa, a la que, supuestamente, hizo proposiciones deshonestas durante su jornada laboral e incluso en 2002 llegó a agredirla.

Tras las jornadas desarrolladas los pasados días 13 y 24 de septiembre, la vista celebrada hoy estuvo centrada en el testimonio de una anciana vecina del pueblo que durante su interrogatorio dijo recordar haber presenciado hace varios años una escena protagonizada por acusado y víctima ante las puertas del Ayuntamiento en la que ambos parecían hablar de dinero, aunque no concretó los términos de la conversación, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

Su testimonio había sido propuesto por la defensa en un intento por demostrar que el origen de la denuncia obedecía exclusivamente al móvil económico, concretamente a la pretensión de la víctima de obtener 12.000 euros bajo chantaje. Sin embargo, los acusadores acogieron con escepticismo dichas declaraciones, máxime cuando la testigo, con problemas de memoria, aseguró reconocer que ni siquiera recordaba el fallecimiento de su marido hace ya veinte años.

Por ello, las acusaciones mantuvieron invariable su petición global de 14 años de cárcel para el funcionario, y tan sólo discreparon en el capítulo indemnizatorio, ya que el fiscal solicitó 12.000 en favor de la víctima y la acusación particular 30.000 euros, mientras que el defensor del imputado solicitó una sentencia absolutoria.

Al término del juicio, la letrada de la Asociación de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales y Malos Tratos de Valladolid (Advasymt), Elena Pérez, en declaraciones a Europa Press, calificó de muy "positivo" el desarrollo del proceso y enfatizó que la mayoría de lo declarado por testigos de referencia "avala y confirma" la versión de la víctima, algo que, en su opinión, no ocurrió en el caso del imputado.

Este, en su declaración el primer día del juicio, dio varias versiones sobre el por qué de los graves hechos que se le atribuyen, entre ellas, además del móvil económico, que fue la propia trabajadora, M.L.D.S.P, la que se le ofreció para mantener relaciones sexuales, algo que él aseguró rehusar, y que incluso todo obedece al intento de ésta de que le echaran del Ayuntamiento.

Los hechos analizados y que quedaron vistos para sentencia se remontan al año 1997, que fue cuando la víctima, M.L.D.S.P, empleada del servicio de limpieza en el Ayuntamiento de Villalón de Campos (Valladolid), comenzó, presuntamente, a recibir del acusado requerimientos de índole sexual, tales como poner películas pornográficas mientras ella limpiaba la biblioteca.

AMENAZADA CON LA PÉRDIDA DE SU EMPLEO.

En ese contexto, siempre según la víctima y los acusadores, el acusado se bajó en ocasiones los pantalones y se masturbó en presencia de la trabajadora, a la que solicitó que se dejara sodomizar y propuso mantener relaciones sexuales en la oficina del piso superior, bajo la amenaza de hacer lo posible con echarla del trabajo si decía algo.

En uno de estos episodios, en noviembre de 2002, la trabajadora mantiene que mientras limpiaba el sótano el alguacil se presentó con el pene fuera y tras soltarle "¡me cago en Dios, que me la chupes!", la acorraló y la introdujo a la fuerza el miembro en la boca hasta eyacular.

Quince días después, a finales de ese mismo año, la víctima sostiene que se hallaba limpiando la oficina de Cruz Roja sita en el piso superior del Consistorio, momento en que el alguacil la introdujo en el baño, le bajó los pantalones y se masturbó eyaculando entre sus piernas, al no acceder ella a la solicitud de que se la chupara ni lograr penetrarla, pese a intentarlo, ya que se resistió.

Además, la limpiadora acusó a su superior jerárquico de haberla amenazado en diciembre de 2002 con lanzarla por la ventana cuando se encontraba subida a una escalera realizando su trabajo.