La Fiscalía no solicitará ninguna medida tras conocer el informe policial de la reunión PSE-Batasuna

Actualizado: viernes, 7 julio 2006 18:31


MADRID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de la Audiencia Nacional anunció hoy que no tiene previsto solicitar al juez Baltasar Garzón la aplicación de ninguna medida contra los participantes de la reunión celebrada ayer entre dirigentes del PSE y de la izquierda abertzale tras conocer el contenido del informe sobre la misma elaborado por la Unidad Central de Inteligencia (UCI) de la Policía, que había sido solicitado por el magistrado, informaron fuentes jurídicas.

Las mismas fuentes señalaron que el informe, de cuatro páginas, se limita a describir la llegada al Hotel Amara de San Sebastián en un vehículo de los participantes por parte de la izquierda abertzale (Arnaldo Otegi, Rufino Etxeberria y Olatz Dañobeitia), así como su entrada en unos salones de acceso restringido, donde se celebró el encuentro. El informe alude después a la salida de los dirigentes de Batasuna, que abandonaron el lugar en el mismo vehículo.

Fuentes fiscales señalaron que el Ministerio Público se "da por instruido" y que de la descripción de hechos realizada por la policía no puede apreciarse ningún elemento delictivo, por lo que no está previsto solicitar actuación alguna al titular del Juzgado Central de Instrucción número 5.

El pasado miércoles, Garzón dictó un auto en el que rechazaba prohibir el encuentro, una medida que le había solicitado la asociación Dignidad y Justicia, personada como acusación en la causa en la que se investiga la posible financiación de ETA a través de la red de herriko-tabernas controladas por Batasuna.

DIGNIDAD Y JUSTICIA

Tras conocer el contenido del informe policial, el letrado de Dignidad y Justicia anunció hoy que tienen previsto solicitar al magistrado la citación en el Juzgado de los participantes en el encuentro, tanto los de la izquierda abertzale como los del PSE, para que aclaren si su celebración podría suponer una vulneración del auto de suspensión de actividades de Batasuna dictado el pasado 17 de enero por el juez Fernando Grande-Marlaska, para prevenir la continuidad de sus actividades delictivas.

En su auto del pasado miércoles, Garzón permitió la celebración del encuentro por considerar que impedirlo excedería del ámbito del auto de suspensión si bien, y a instancias de la Fiscalía, requirió a la UCI que informara "ampliamente" sobre la participación en la reunión de las personas pertenecientes a Batasuna.

En su auto, el magistrado señalaba que en la convocatoria de reunión, que fue anunciada por el secretario general del PSOE, Patxi López, "no se observa ningún elemento que induzca a pensar que, con ella, se pretende favorecer la acción delictiva del complejo terrorista dirigido por ETA, en el que se incluye Batasuna; sino todo lo contrario, evitar que el hecho delictivo continúe produciéndose".

Garzón justificó su decisión en el hecho de que la iniciativa de la reunión no procedía de de la organización suspendida, sino del secretario general en Euskadi del Partido Socialista, "partido político legal y sin ninguna limitación diferente a la establecida por la Ley para cualquier ciudadano u organización".

Por ello, cualquier limitación lo sería, en todo caso, a 'posteriori' y nunca preventivamente, "porque de ser así, el juez se convertiría en una especie de controlador de la acción política de un partido democrático, acción que sería ilegal por contraria a derecho", al exceder de sus facultades jurisdiccionales.