El forense considera no apto para declarar a un acusado de homicidio en una discoteca de Gilena (Sevilla)

SEVILLA, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

Un informe forense remitido recientemente a la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Sevilla considera no apto para declarar en el juicio a A.L.F.P., un joven de 24 años acusado de asestar varias puñaladas a otro en una discoteca de la localidad sevillana de Gilena durante una fiesta de disfraces.

El informe, al que ha tenido acceso Europa Press, se redactó con la intención de dilucidar si el encartado es capaz de entender que va a ser juzgado por un delito de asesinato en grado de tentativa y de responder "sin merma" a las preguntas que pudieran realizársele en la vista oral.

Según la exploración psíquica a que se sometió al acusado, el sujeto tiene "evidentes alteraciones psíquicas". Su capacidad intelectual se encuentra "dentro de lo normal" y "le permite actuar conforme a un raciocinio suficiente en los actos de su vida diaria".

No obstante, A.L.F.P. presenta "alteraciones" en su afectividad, obteniéndose datos que orientan hacia el diagnóstico previo de esquizofrenia paranoide, pues presenta un cuadro de alucinaciones tanto visuales como auditivas.

Uniendo a ello su historia de drogodependencia con consumo de varios tóxicos, el forense concluye que se mantiene un cuadro psiquiátrico invalidante derivado de su "ideación delirante tanto de perjuicio como persecutoria". Por ello, considera que "no es capaz de entender en su plenitud que va a ser juzgado por un delito de asesinato en grado de tentativa" y que durante el juicio se darán las circunstancias "que afectan sus delirios persecutorios y de perjuicio, con respuestas influidas por estos delirios".

EL FISCAL SOLICITA SIETE AÑOS DE PRISION

Los hechos acaecieron en la madrugada del 29 de diciembre de 2002 cuando el acusado, de 24 años e identificado como A.L.F.P., se hallaba en la discoteca 'Molinos' de Gilena.

En el mismo lugar estaba S.M.R., que iba disfrazado de oso y que, en el momento en que decidió marcharse, observó cómo a su primo le estaban pegando varias personas. Tras acercarse a uno de los agresores, al que le dijo que 'ya van dos veces', recibió varios puñetazos y quedó tendido en el suelo.

Varias personas comenzaron a pegar puñetazos y patadas a S.M.R. mientras continuaba en el suelo. En ese instante, el acusado le "asestó varias puñaladas" que le produjeron diversas heridas inciso punzantes, requiriendo 26 días para su curación y dejándole como secuelas hasta seis cicatrices. "Dichas heridas hubieran producido la muerte de no haber sido por lo grueso del disfraz de oso que llevaba, lo que impidió que la hoja de la navaja penetrara aún más", señalaba el escrito del fiscal.

Según incide el fiscal, la navaja utilizada en la presunta agresión, que momentos antes A.L.F.P. había exhibido amenazante a otro joven para evitar que entrase en la pelea, tenía unos diez centímetros de hoja.

La Fiscalía pide para el procesado, conocido como 'El Metralla' y que carece de antecedentes penales, una pena de siete años de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa, además de 1.900 euros de indemnización para la víctima por las lesiones y las secuelas ocasionadas.