BILBAO, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), Antonio García, aseguró hoy que una medida "tan irreparable" como el cierre de un periódico, como el de 'Egunkaria', "hay que pensárselo más de cien veces".
En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, García manifestó que las resoluciones del caso Egunkaria, "desde el derecho" y con todo su respeto, no le han gustado "especialmente".
A su juicio, "el cierre de un periódico en un régimen de democracia liberal, que es un régimen de opinión", es una "medida tan drástica, tan definitiva, y probablemente, tan irreversible e irreparable", que "hay que pensársela más de cien veces".
En este sentido, dijo que, si hubiera sido él el magistrado "que tiene entre manos ese asunto", no habría adoptado esa resolución. "Esa es mi opinión, que no coincide con la del magistrado que verdaderamente tiene competencia al respecto y encomendado ese asunto. Él lo vio de otra manera, hay que respetar su decisión. Veremos lo que pasa, y tiempo tendremos para opinar ya con más fundamento", señaló.
ANGELA MURILLO
Además, se refirió a la presidenta del Tribunal de la Audiencia Nacional que juzga al ex portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, y reconoció que las frases que empleó durante la vista oral no fueron "edificantes", pero subrayó que se trata de "una estupenda magistrada", con una trayectoria "sin mácula". "Los jueces somos personas de carne y hueso", apuntó.
De esta forma, el magistrado se refirió a las polémicas palabras de Murillo durante el juicio, cuando la letrada Jone Goirizelaia solicitó permiso al tribunal para entregar una botella de agua al acusado, a lo que la presidenta respondió: "Como si quiere beber vino".
Poco después, cuando había finalizado el interrogatorio a Arnaldo Otegi, la magistrada hizo uso de su potestad para plantear preguntas a los acusados y emplazó al ex portavoz de Batasuna, que había aprovechado su declaración para hacer un discurso político, a decir si condenaba o no "rotundamente" la violencia. Otegi dijo que no iba a contestar, y Angela Murillo apostilló: "Ya lo sabía".
El portavoz de la APM afirmó que siente "un gran respeto" por Murillo porque "es una estupenda magistrada y lo ha demostrado con una trayectoria profesional sin mácula". "Pero, el otro día en la vista que está presidiendo, no estuvo especialmente afortunada. Sus frases a mí no me parecieron edificantes", señaqló.
En su opinión, "no venían a cuento determinadas aseveraciones de las que hizo en la forma en las que las dijo, el modo en el que se dirigió a una persona acusada que, evidentemente, merece todo el respeto".
"Yo creo que Angela Murillo no tuvo un buen día esa mañana y hay que asumirlo también con cierta tolerancia. Hay que hacer un esfuerzo por entender que los jueces somos personas de carne y hueso, y aunque debamos contenernos, sujetarnos y estar muy por encima de ese tipo de cosas, a veces, hay que perdonarnos que tengamos un mal día", concluyó.