Un guardia civil confirma que la Goma 2 ECO y los detonadores proceden de Mina Conchita

Actualizado: jueves, 10 mayo 2007 22:10


MADRID, 10 May. (OTR/PRESS) -

El sargento de la Guardia Civil que realizó la investigación sobre el origen de los explosivos y los detonadores utilizados en los atentados del 11-M, confirmó hoy ante el tribunal que juzga la masacre, que la Goma 2 ECO cuyos restos fueron hallados entre los escombros del piso de Leganés y los detonadores incautados en los trenes y otros escenarios vinculados al 11-M procedían de Mina Conchita. Sin embargo, cuando uno de los abogados le inquirió si podría afirmarlo con "indubitadamente", el agente respondió que "la absoluta certeza no creo que la tenga ni Dios".

Este experto, que realizó un exhaustivo seguimiento de los cartuchos cuya numeración apareció en Leganés desde su fabricación hasta su entrega a la mina, también analizó los detonadores incautados en los trenes y otros escenarios vinculados a los hechos, para concluir que procedieron de la misma mina que apunta el Ministerio Fiscal en su escrito de acusación. Este informe fue presentado por el sargento en solitario, ya que el otro guardia civil que participó con él se encontraba de servicio en Málaga.

El agente relató que su investigación partió de las numeraciones que aparecieron en el envoltorio de los cartuchos explosionados en el piso de Leganés, que le fueron facilitados por el juez Juan del Olmo. Dichos números le permitieron identificar los "palés" que agrupaban las cajas con dichos cartuchos, que fueron fabricados en la planta que la Unión Española de Explosivos tiene en Páramo de Masa (Burgos).

La prueba pericial examinó los canales de distribución de las numeraciones desde dicha fábrica hasta cinco puntos de almacenamiento, si bien los cartuchos inicialmente vinculados a los atentados sólo habían sido llevados a uno de estos almacenes, el de Columbiello (Asturias), y partir de ahí se distribuyeron a un depósito comercial en Valdellano. Desde Valdellano la Guardia Civil realizó un seguimiento de las numeraciones investigadas hasta a Canela de Seguridad, que es la empresa que distribuyó a Mina Conchita

NI DIOS

Durante su turno de interrogatorio, el abogado Gerardo Turiel, que defiende al presunto líder de la denominada "trama asturiana" que facilitó el explosivo a los terroristas, José Emilio Suárez Trashorras, preguntó al perito si podía afirmar con certeza, "indibutadamente", que las numeraciones de los cartuchos encontrados en Leganés (Madrid) procedían de Mina Conchita. A esta pregunta, el sargento respondió: "Esa absoluta certeza no creo que la tenga ni Dios, con el máximo respeto a la Sala".

Según este perito, al comparar las numeraciones de las partidas que llegaban a la mina con lo apuntado en los libros que se llevaban en dicha explotación para justificar el consumo de explosivos -donde se reflejaban cantidades redondas que no correspondían con lo utilizado en realidad- se deduce la existencia de una falsificación en dichas contabilidades. Añadió que las características de la mina, situada en un terreno muy abrupto y con innumerables escondrijos, hacían además imprescindible la implicación en las sustracciones de alguien que conociera a fondo dichas instalaciones, por lo que Emilio Suárez Trashorras no podría haber prescindido de un minero en activo como el también procesado Raúl González.