BILBAO, 23 Abr. (OTR/PRESS) -
Todas las formaciones políticas en el País Vasco, a excepción del PP, acudían ayer en el Palacio Eskalduna de Bilbao a un acto de reconocimiento a las víctimas del terrorismo que respaldaron unas 1.500 personas y 140 víctimas. El homenaje, organizado por el Gobierno vasco -y que no cuenta con el apoyo de la AVT- estuvo presidido por el lehendakari Juan José Ibarretxe, quien pidió perdón a las víctimas por no "haber estado a la altura de las circunstancias como sociedad" porque no se ha sabido transmitir "colectivamente nuestro apoyo a las miles de personas que han sufrido la agresión de la violencia".
La intervención del lehendakari estaba consensuada entre los partidos del tripartito y el PSE-EE. En su discurso reconoció que este acto llegaba "tarde" y que "difícilmente servirá para restaurar en su totalidad unas heridas que tienen muchos años de antigüedad". Ibarretxe pidió perdón a la víctimas y a sus familiares por no "haber estado a la altura de las circunstancias", porque, aunque han existido "muchas" demostraciones de solidaridad y cariño individual "no hemos sabido transmitir colectivamente nuestro apoyo a las miles de personas que han sufrido la agresión de la violencia".
"Hoy queremos solemnizar el reconocimiento de una deuda que queremos saldar de todo corazón", añadió en su manifiesto, en el que se denuncia que la violencia de ETA constituye una "flagrante traición a los valores más nobles de este pueblo y a los valores de la democracia". Asimismo, destacó que el futuro al que aspira pasa por "desechar la utilización partidaria del terrorismo que lleva inexorablemente a la confrontación política y crea un profundo desasosiego entre las víctimas.
UN ACTO DE "PERDÓN Y MEMORIA"
El presidente del EBB del PNV, Josu Jon Imaz, apoyó con su presencia al lehendakari Ibarretxe y el acto de homenaje a las víctimas del terrorismo, que, para él, tiene una doble finalidad, la de "perdón y memoria" un "paso adelante importante en lo que tiene que ser la construcción de un futuro de la sociedad vasca para todos".
Patxi López, secretario general del PSE, reconoció también el "error" de las instituciones vasca "que no siempre han estado cerca" de las víctimas, lo que "las convertía en víctimas de la violencia y también del olvido", dijo. El dirigente socialista apunto que lo importante es que el acto "no se quede aquí" y señaló que este es el "inicio de un nuevo tiempo" de la sociedad vasca en su conjunto.
Por su parte, Aralar defendió la necesidad de realizar un reconocimiento a "todas" las víctimas para poner las "bases necesarias para una reconciliación social", declaró su parlamentaria Aintzane Ezenarro. También el portavoz de Presidencia de EB, Mikel Arana afirmó que para "vivir en paz" es imprescindible que "todos" los afectados por la violencia, tanto los de ETA, del GAL o de la represión franquista" tengan un "reconocimiento de la sociedad".
EL PP ACUSA A IBARRETXE DE "TRAICIÓN"
Las críticas por parte del PP no han tardado en aparecer, en este caso de boca del secretario general del PP vasco, Carmelo Barrio, quien desde Vitoria aseguró ayer que Ibarretxe "en el momento en que salga por la puerta, van a ponerse a trabajar porque Batasuna o su disfraz electoral, como ANV, ASB o PCTV, se puedan presentar a las elecciones", con lo que se daría "cumplimiento a la voluntad de ETA expresada en la patética entrevista de hace dos semanas" y "constituiría una nueva traición a las víctimas del terrorismo".
Además, añadió que la "prioridad" de su formación es "la búsqueda de la libertad y la derrota del terrorismo" y "el final sin esperanza de ETA, que amenaza sin parar", y "a la que no le ofrecemos otra alternativa que desaparecer y fracasar". En su opinión, "no es sincero y no quiere hacer de verdad un homenaje a las víctimas".