Imaz cree que "los acuerdos políticos no deben estar condicionados al diálogo con ETA"

Actualizado: sábado, 15 abril 2006 14:17

El presidente del PNV apuesta porque las víctimas no sean agentes políticos del proceso, porque "serían víctimas por segunda vez"

BILBAO, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PNV, Josu Jon Imaz, aseguró que tras el alto el fuego permanente de ETA, "la prioridad es la consecución de la paz", para la que "por higiene democrática, los acuerdos políticos no deben estar condicionados al diálogo con la organización terrorista".

En una entrevista concedida ayer al diario El Mundo, y recogida por Europa Press, el líder jeltzale apostó por que las víctimas no sean "agentes políticos del proceso", para que no se conviertan "en víctimas por segunda vez al ser utilizadas en la pelea partidista". "Lo que debe exigirse es que a las víctimas se les reconozca el derecho a la memoria y se les garantice el reconocimiento social", añadió.

"No me gusta hablar de personas vencedoras y personas vencidas", sino "que la idea de la democracia sea una idea vencedora y el totalitarismo sea una idea vencida", explicó en referencia a la reflexión del Defensor del Pueblo sobre que la reconciliación pasa porque haya vencedores y vencidos.

Imaz defendió que hay que esperar "un tiempo razonable, unos dos meses, para verificar la situación y ver que las amenazas, las extorsiones y los ataques han desaparecido definitivamente, y por tanto que existen condiciones inequívocas para iniciar por parte del Gobierno un diálogo con ETA".

Por el contrario, el presidente del PNV exigió un cambio inmediato en la situación de los presos porque "su acercamiento debería haberse producido hace muchos años. Debe realizarse ya. Ayer mejor que hoy y hoy mejor que mañana, porque es algo que pertenece a los derechos de las personas".

Sobre el abandono de las armas, aseguró que la banda terrorista "ha sufrido una convulsión y un debilitamiento en los últimos años que hace mucho más difícil que vuelvan a repetir el error de antes", en referencia a una hipotética vuelta a la acción violenta.

HACERLO IRREVERSIBLE

Imaz expuso que "estamos ante una esperanza que nos hace vislumbrar un horizonte sin violencia, pero que, lógicamente, nos obliga a transitar con las cautelas debidas" para que el alto el fuego "que todavía no es definitivo, convertirlo en irreversible".

Respecto a los cambios en el Ejecutivo central, el presidente del EBB los valoró como "un refuerzo del proceso de paz que pone al mando a los directamente implicados", por lo que los respaldó.

El líder jeltzale criticó la Ley de Partidos, "una restricción de derechos político" y también la actuación de Batasuna, que provoca "gratuitamente situaciones de confrontación con las instituciones vascas, y más concretamente con el PNV", por lo que pidió "responsabilidad" a la formación ilegalizada. Sus críticas se extendieron también al PSOE y al presidente del Gobierno, a los que animó a buscar "la solución jurídica para que la izquierda abertzale tenga su capacidad de representación política normalizada".

Imaz se mostró tranquilo ante la posibilidad de que, una vez desaparecida ETA, el PSE y Batasuna hicieran la 'pinza' al PNV para arrebatarle el poder, porque desde su formación continuarán "trabajando para la sociedad vasca", adelantó.

El presidente del PNV se refirió a la labor de Otegi y del resto de dirigentes de Batasuna, a los que reconoció un "papel relevante" en la transición "que ese mundo está llevando a cabo".

"El PNV nunca colaborará en una estrategia de exclusión del PP", porque quiere "un acuerdo integrador en Euskadi" que incluya a los populares, aclaró. Imaz añadió que "bienvenida sea la convocatoria del Pacto Antiterrorista si sirve para incorporar al PP al diálogo" para posteriormente dejar atrás ese pacto, "una herramienta del pasado".

Sobre la independencia, el dirigente nacionalista consideró que "en estos momentos no es el debate de la sociedad vasca", a pesar de que en su programa se incluye el derecho de autodeterminación entendido como un camino "inclusivo" de "diferentes identidades y sensibilidades". El plan Ibarretxe "institucional y políticamente es un proyecto que tiene plena validez" agregó.

POR EL EQUIPO

Imaz explicó que el PNV cumple su papel en el proceso con "discreción y lealtad", porque "esto es como en un equipo de fútbol. Ha habido gente a la que le ha tocado meter los goles, nosotros hemos jugado el partido por el equipo, y los goles los consideramos también nuestros".

"Si alguien piensa que el lehendakari, máximo representante de la sociedad vasca, no tiene que ser agente activo del problema más importante de los últimos 30 años se equivoca", la sociedad vasca "no lo toleraría", concretó.

Respecto a la aplicación de justicia, el dirigente del PNV, apostó por una aplicación "en un contexto social", por lo que "la situación de paz" debe ser un dato "a la hora de tomar decisiones" judiciales.