BILBAO, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente del EBB del PNV, Josu Jon Imaz, indicó ayer que para que el proceso de paz avance es necesaria la desaparición de todo tipo de violencia, en referencia a la violencia callejera, y "volver a rubricar esa voluntad por parte de ETA, que la izquierda radical lo defendió hace dos años en la Declaración de Anoeta: una separación nítida entre lo que tiene que ser el diálogo para poner fin a la violencia, y lo que tiene que ser el diálogo político entre partidos".
En declaraciones a Cuatro, recogidas por Europa Press, Imaz dijo haber visto en distintos dirigentes políticos de Batasuna vocación de buscar acuerdos democráticos a futuro y de abandonar el camino de dar soporte a la violencia y de buscar un escenario de convivencia. Por ello, les pidió que tengan autonomía política y "de una vez por todas, abandonen ese tutelaje político continuo al que ETA les quiere someter".
Para el líder nacionalista, hay motivos para la esperanza y "una ventana abierta", a pesar de los datos "preocupantes" en las últimas semanas como el robo de 350 pistolas en Francia y el incremento de la kale borroka.
En su opinión, ETA tiene que romper el "viejo esquema de tutelar el diálogo político entre partidos". "ETA no tiene que condicionar el futuro político de Euskadi", insistió, para señalar que si esto se aceptara, supondría "tanto como aceptar que la violencia ha sido útil para lograr objetivos políticos".
Imaz manifestó que "hay datos objetivos para pensar que el camino que se inició hace tres años y medio, que es el tiempo que llevamos sin asesinatos, tiene bases sólidas, un contexto internacional que ha cambiado, que hace las cosas más difíciles para el terrorismo y también cambios notables en la sociedad vasca, incluso en el mundo político que ha dado soporte a la violencia durante tantos años".
No obstante, reconoció que en estos últimos tiempos "posiblemente la posición de ETA está cambiando respecto a aquella que pudo haber tenido hace un año", por lo que indicó que "sería bueno para que ese diálogo con ETA pudiese reconducirse adecuadamente, el que no hubiese fracturas o divisiones en el campo de los partidos políticos".
En este sentido, indicó que la posición del PP "fortalece a ETA, en la medida en que mantiene un discurso diciendo que ETA está obteniendo victorias, lo cual no es así". "Ante un Estado y una clase política y una sociedad dividida y fracturada, ETA tiene una capacidad mayor de hacer daño, potencialmente", aseveró, por lo que abogó porque todos los partidos trabajen en favor de un escenario de solución.
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