Una ingeniera de Acuamed se percató de un pago de 2 millones por una escollera inexistente

Actualizado: jueves, 26 mayo 2016 20:00

Escribió una carta a varios secretarios de Estado de Medio Ambiente denunciando las "irregularidades" y el "acoso" que ella sufría

MADRID, 26 May. (EUROPA PRESS) -

Gracia Ballesteros, ingeniera de Caminos que trabajó como gerente territorial en Acuamed, denunció ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco que la empresa pagó dos millones de euros por una escollera que "no existía", en un contrato para la obra Rambla Gallinera, en Valencia.

"Fui a la obra, y no había escollera", señaló ante el juez que investiga los contratos presuntamente fraudulentos en esta empresa pública ligada al Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente.

Pese a ello, Acuamed había certificado esas "unidades inexistentes" de dicha obra. "Era fácil de detectar que era falso", precisó Ballesteros, que fue cesada de su puesto como gerente de la cuenca del Júcar y, finalmente despedida en julio de 2015

Su impresión defendió ante el juez, es que fue cesada como una represalia por negarse a dar el visto a bueno al "montaje" y a las prácticas fraudulentas de Acuamed a pesar de que recibió presiones por parte del principal acusado en la trama y entonces director general, Arcadio Mateo.

PRESIONES DE CONTRATISTAS

Y también dijo que sufrió presiones por parte del empresario Nicolás Steegmann, contratrista que llegó a disponer de "una valoración interna" ante la licitación de la obra Campello-Muchamiel que, según el relato de la ingeniera, le facilitó Mateo.

"Le pregunté que cómo tenía esa hoja porque es una documentación interna y absolutamente confidencial", explicó en su declaración ante el juez, añadiendo que en dicha valoración la empresa de Steegmann salía mal parada y éste le espetó que "eso no podía ser". De hecho, le facilitó un modelo de valoración hecho por él mismo, "de su casa".

Ballesteros desveló que durante esa conversación el empresario pasó a amenazarla: "Me dijo que conocía a mucha gente, que era íntimo amigo de la directora general, del ministro, y que iba a destrozar mi carrera profesional", declaró.

También afirma que Mateo se puso "violento" con ella por no "tratar bien" a algunas de las empresas contratistas porque "eran amigos suyos". Ante todas las diferencias con el director general, finalmente la "mantuvieron al margen" de todas las adjudicaciones.

Antes de ser despedida en junio de 2015, envió una carta al entonces secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas, para poner en su conocimiento la "irregularidades" en Acuamed. Y le solicitó que tomase medida para que cesaran estas prácticas así como el "acoso" hacia ella.

Después de que Ramos de Armas pasara a ocupar un puesto en Presidencia, Ballesteros dirigió otra misiva al nuevo secretario de Estado de Medio Ambienten Pablo Saavedra, en julio del pasado año. Sin embargo, la ingeniera no obtuvo respuesta por su parte.