Inmigración.- El obispo de Jerez insta a no tener "actitudes negativas" con "nuestros hermanos" los inmigrantes

Actualizado: lunes, 16 octubre 2006 16:01

JEREZ DE LA FRONTERA (CADIZ), 16 Oct. (EUROPA PRESS) -

El obispo de Jerez de la Frontera (Cádiz), monseñor Juan del Río, consideró que la inmigración "ha dejado de ser algo anecdótico y puntual" para convertirse en "un fenómeno que produce desasosiego, preocupación y muchas veces rechazo en nuestra sociedad", contra lo cual abogó por "preparar corazón y mente" para que las actitudes "no sean negativas" con respecto a los llegados, "que son hijos de Dios y nuestros hermanos".

En una carta pastoral a la que tuvo acceso Europa Press y que está encabezada con la cita bíblica 'No maltratarás al forastero, ni lo oprimirás, pues forasteros fuisteis vosotros en el país de Egipto', monseñor Del Río llamó la atención sobre los rostros de la "riada" de inmigrantes "que en los últimos tiempos se ha incrementado" que muestran los medios de comunicación, rostros "jóvenes de los que se adivina la tragedia personal y familiar que viven en sus países, a la que no es ajeno este primer mundo rico al que desean acceder".

En este sentido, destacó que en este mundo "globalizado", los medios, especialmente la televisión, "ha hecho llegar el estilo de vida de esta sociedad opulenta desde las más remotas aldeas de montaña hasta los poblados de la selva africana", pero "ocultando las dificultades y la dureza del trabajo para tener acceso a estos bienes".

Ello, según continuó, ha producido una "fascinación", especialmente en los más jóvenes, "que desean participar a cualquier precio de este mundo" y este precio "muchas veces es la propia vida, cuando no los ahorros de toda la familia, que entregan a mafias sin escrúpulos a cambio de un billete para el sueño.

Ante este "drama", Del Río recordó que a la Iglesia "ningún sufrimiento humano le deja indiferente", mencionando que desde hace siglos los misioneros "han salido en busca de los hermanos más pobres" en sus países, donde siguen desarrollando un "importante papel de promoción humana y social".

Además, añadió que en los países receptores, la Iglesia por medio de Cáritas y otras instituciones, "presta la primera ayuda" a las oleadas de inmigrantes que llegan a las costas y parroquias y conventos "son lugares de acogida con muchos voluntarios cristianos".

Así las cosas, el obispo jerezano, en su escrito, aseguró que la preocupación por la inmigración está presente en su Diócesis y se ha plasmado en el Plan Pastoral 2006-2009, que comienza con un curso sobre este fenómeno, promovido por la Delegación de Pastoral Social, y al que invitó a todos "los que no quieren quedarse sólo con lo que dice la televisión y otros medios de comunicación sobre las migraciones".