Interior vasco reconoce que ha investigado la filtración de datos sobre ETA a un periodista pero no las fuentes de éste

BILBAO 5 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Departamento de Interior del Gobierno Vasco afirmó hoy que ha investigado la filtración a un medio de comunicación de datos sobre actividades terroristas de ETA, presumiblemente "realizada por un ertzaina", y rechazó que las pesquisas se hayan centrado en averiguar las fuentes del periodista que publicó la noticia.

De esta manera, se refirió en un comunicado a la información difundida hoy en un rotativo vasco en la que se señala que Interior controló el teléfono de un periodista para "identificar a sus fuentes". El periodista publicó una información en la que se denunciaba que un presunto colaborador de ETA habia sido avisado de que iba a ser detenido por la Ertzaintza tres días antes de la intervención de la Policía Autónoma.

Interior aseguró que "jamás" ha dirigido una investigación policial para averiguar las fuentes de un periodista. En este sentido, precisó que lo que hizo fue investigar, "por orden judicial", la filtración de esa información al medio de comunicación, "presumiblemente realizada por un ertzaina, y relacionada con una investigación sobre terrorismo".

El Departamento precisó que sus averiguaciones sobre el citado caso se centraron en una filtración de datos sobre actividades terroristas. Añadió que el objeto de las pesquisas era conocer si alguien de la Ertzaintza las habría hecho públicas, "facilitándoselas de manera ilegal a un medio de comunicación", ya que eran informaciones sobre actuaciones terroristas "a las que únicamente podían tener acceso los propios investigadores policiales y la Autoridad Judicial".

Además, afirmó que la investigación encaminada a identificar al autor de la filtración fue ordenada y dirigida por el juez correspondiente, después de que tuviera conocimiento por la Ertzaintza de la existencia de esa filtración. Interior destacó que se trataba de un "hecho grave", ya que la filtración estaba relacionada con el posible intento de evitar la detención de un presunto miembro de ETA.

La consejería de Interior explicó que la orden judicial incluyó acceder al extracto en papel de las llamadas realizadas o recibidas (tránsitos telefónicos) por un determinado periodista "y no su grabación" con el objetivo de intentar determinar a través de las mismas la identidad del ertzaina "infractor".

El Departamento afirmó que no le corresponde "enjuiciar determinadas prácticas periodísticas consistentes en publicar informaciones robadas", pero indicó que es su "obligación" investigar esas "sustraciones para poner a sus responsables a disposición judicial".

"Nadie, incluidos ertzainas o periodistas, se encuentran por encima de la Ley. El poder judicial y la Ertzaintza tienen la obligación de investigar las actividades ilícitas, sean de la naturaleza que sean, y de incluir en sus investigaciones a todas las personas relacionadas con ellas, sin excepciones", concluyó.