VALENCIA, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Antonio Bernabé, aseguró hoy que la Dirección General de Instituciones Penitenciarias ha tomado "las medidas oportunas para garantizar la salud" de los once presos islamistas que se declararon en huelga de hambre el pasado sábado en diferentes cárceles de esta autonomía.
Bernabé realizó estas declaraciones en Alicante, donde confirmó que en las prisiones alicantinas de Villena y Fontcalent, y en la cárcel de Picassent, en Valencia, existen once internos en situación de preventivos y presuntamente relacionados con grupos islamistas que se han declarado en huelga de hambre.
La protesta de estos reclusos comenzó el sábado ya que los presos se consideran inocentes y argumentan que se les está acusando falsamente de ser terroristas, informaron a Europa Press en fuentes penitenciarias.
En el establecimiento penitenciario de Villena, cinco reclusos han secundado la protesta. Dos de ellos, Hassan el Haski y Otman el Gnaoui, fueron juzgados en los juicios del 11-M, y en el trascurso de este proceso, ya se pusieron durante unos días en huelga de hambre.
También se han puesto en huelga de hambre en este centro otros tres presuntos terroristas Abdelkrim Bensmail, Ahmet Chebli y Hassan Mourdude. El primero de ellos, apareció envuelto en el 11-M, ya que en su celda guardaba las direcciones de algunos miembros de ETA, como Henry Parot, e ingresó en la cárcel por la 'Operación Nova'. Por esa misma razón fue detenido Chebli, mientras que Mourdoude, está acusado de financiación.
De los once reclusos en huelga de hambre, cuatro se encuentran en la prisión de Foncalent, en Alicante. Son Mohamed Amin y Dgilali Mazari, ambos detenidos en la 'Operación Nova', y Saffet Karakoc y Noureddine Serroukh, acusados de pertenecer a una red que buscaba financiación para las actividades terroristas de Al Qaeda.
Finalmente, en la cárcel de Valencia, en el centro penitenciario de Picassent, se han sumado a la huelga de hambre, Riduane el Ouarma, de la operación Tigris y Souhil Kaouka, detenido en el conocido como 'Comando Dixan'.
CONTROLES MÉDICOS
Desde la Dirección General de Instituciones Penitenciarias aseguraron a Europa Press que los presos que han secundado las protestas recibirán asistencia médica diariamente, pasarán por controles de peso y se les tomará la tensión, además de realizárseles analíticas para averiguar su estado de salud.
Este departamento no da la mayor trascendencia a esta huelga de hambre ya que, según declararon, se trata de una medida de presión para llamar la atención, "habitual en el sistema penitenciario".
En cualquier caso, los responsables penitenciarios están investigando como se han puesto de acuerdo los once islamistas para iniciar al mismo tiempo la huelga de hambre.
