MADRID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
El coordinador ejecutivo de Política Institucional de Izquierda Unida, Félix Taberna, ha expresado su "satisfacción" ante las palabras de la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, confirmando que promoverá una reforma electoral para que "el pluralismo político esté mejor representado".
"El Gobierno empieza a dar muestras de querer cumplir y poner en valor lo acordado --argumentó--. Primero, el pasado mes de julio en una reunión en el Palacio de La Moncloa entre José Luis Rodríguez Zapatero y Gaspar Llamazares, cuando el presidente del Gobierno se comprometió a estudiar en esta legislatura una reforma electoral amplia y, en segundo lugar, entre IU y el Grupo Socialista y el PSOE, en el marco del apoyo político a los Presupuestos Generales de 2006".
En concreto, Rodríguez Zapatero y Llamazares acordaron a finales de julio solicitar un informe al Consejo de Estado sobre las líneas que se podrían seguir para reformar la vigente ley de 1985, y meses después, en octubre, delegaciones del PSOE e IU-ICV dieron un paso más acordando promover la creación de una subcomisión parlamentaria en el Congreso que, sin esperar a esos informes pendientes del Consejo de Estado, comience a estudiar las posibilidad de reforma electoral, con un plazo inicial de seis meses.
Esa comisión no permanente del Congreso, según firmaron ambas partes, habría de "estudiar y proponer una reforma del sistema electoral, en el plazo de seis meses, para que mejore la proporcionalidad e introduzca la paridad en nuestro sistema electoral; así como incorporar el derecho al voto en elecciones municipales de extranjeros residentes legales con una permanencia continuada en nuestro país, sobre bases de reciprocidad".
TODO PARADO
Lo cierto es que, a estas alturas, no hay informe del Consejo de Estado ni se ha llegado a constituir la subcomisión parlamentaria, pero ayer la vicepresidenta reiteró el compromiso del Gobierno de acometer la reforma, y ahora IU espera que la reforma se impulse de una vez.
"Un sistema electoral democrático se aleja de su raíz si aquella correlación entre votos y escaños queda gravemente distorsionada y este es el caso que nos ocupa y que pretendemos resolver --argumentó Taberna--. Ante esa situación, la legitimidad democrática, nacida de los votos populares, se ve frustrada por un sistema electoral que permite ese grado de disfuncionalidad y de ruptura de la proporcionalidad exigible".
Izquierda Unida recuerda que "todos" los partidos saben que esta formación es la más perjudicada por la actual Ley Electoral, que adolece de falta de proporcionalidad en el reparto de escaños y la sobre-representación de algunas circunscripciones, pues siendo la tercera en número de votos (1.300.000), es la sexta en número de escaños (sólo cinco). "Todo ello debido a una ley que prima claramente a los dos partidos mayoritarios y a las formaciones nacionalistas", apostilló.
Entre las propuestas de IU para equilibrar el sistema electoral figura la ampliación del número de diputados de 350 a 400 mediante la creación de un 'colegio nacional de restos', así como disminuir el mínimo de parlamentarios que se eligen por provincia (actualmente cuatro), y promover una interpretación "diferente" de la Ley d'Hondt.
Desde Izquierda Unida se asegura que sus propuestas no implican la necesidad de reformar la Constitución, ya que ésta ya prevé cambios en este sentido. Los cambios se afrontarían a través de modificaciones en la ley para adecuar mejor el sistema electoral a las funciones que éste debe cumplir en la formación de la representación política del Congreso de los Diputados.
Por contra, el compromiso de los socialistas con la reforma electoral se centraba más en asuntos como la paridad o la reducción de las campañas, completados con una nueva regulación del voto de los residentes en el extranjero. De hecho, el aumento de 350 a 400 escaños no llegó a incluirse en el programa electoral del PSOE, pero sí fue una idea que en su día ya planteó el socialista Gregorio Peces Barba, uno de los 'padres' de la Constitución y miembro del Comité de Sabios del que se rodeó Zapatero en la última campaña.
EL PSOE QUIERE CAMBIOS POR CONSENSO
En cualquier caso, los socialistas han venido manteniendo que no apoyarán cambios en la legislación electoral que no sean asumidos por amplio consenso, dado que se trata de las reglas del juego del sistema democrática. El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, también quiso en su día tranquilizar a las minorías nacionalistas recalcando que su apuesta por mejorar la proporcionalidad del actual sistema electoral "no va contra nadie".
Por su parte, las pretensiones del PP son bien distintas. Tras las elecciones gallegas, Mariano Rajoy, también anunció su idea de plantear cambios en la legislación electoral, pero para favorecer que el partido más votado, aunque no cuente con mayoría absoluta, acceda al Gobierno.
La posibilidad de reformar la legislación electoral siempre ha sido vista con recelo por las formaciones minoritarias de ámbito territorial. Cuando surgió este debate en julio del pasado año, tanto ERC como el PNV ya anticiparon su rechazo a compensar el problema de la "infrarrepresentación" de IU con el endurecimiento de las posibilidades de acceso al Parlamento para los nacionalistas.