SAN SEBASTIÁN, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de la izquierda abertzale Pernando Barrena ha acusado al Estado español de intentar que el proceso democrático "se pudra como agua estancada", frente a lo cual, ha reiterado su compromiso de seguir siendo "agentes proactivos para la resolución democrática y la transformación socio-política", aunque tengan que "desde la ilegalización, desde la cárcel, desde la imputación y desde el banquillo".
En una rueda de prensa del movimiento Eleak en el Palacio Miramar de San Sebastián en la que han tomado parte militantes de la izquierda abertzale encausados en diferentes sumarios, como el del caso Bateragune, Barrena ha denunciado procesos como éste o el abierto contra D3M, entre otros, y ha llamado a participar en la manifestación que tendrá lugar en Bilbao el 5 de mayo para denunciar estos juicios.
El portavoz de la izquierda abertzale ha denunciado que el juicio "político" que pronto comenzará contra D3M y Askatasuna, la sentencia "política" entorno al sumario Bateragune y la que se ha dado hace dos semanas para "perpetuar la pena de prisión a personas que ya han cumplido su condena" suponen "gravísimos ataques contra el proceso de solución democrática".
Frente a ello ha afirmado que la "mayoría social vasca" está a favor de las soluciones. Barrena ha censurado el "rodillo policial-judicial contra la izquierda abertzale" del Estado español que ha "aplastado a organizaciones juveniles, medios de comunicación, movimientos populares, agentes políticos y una institución incluso", al tiempo que "cientos de militantes de la izquierda abertzale han sido perseguidos, detenidos, encarcelados, imputados y castigados".
"Han querido agredir y pulverizar la capacidad organizativa de la
izquierda abertzale, sucediéndose una tras otra, secuencias de redadas, ilegalizaciones, juicios y castigos políticos", ha denunciado.
Además, ha censurado que se ha pretendido "condicionar y obstaculizar la apuesta estratégica puesta en marcha por la izquierda abertzale para promover un proceso de resolución democrática definitiva" y ahora mantienen "medidas político-judiciales de total excepción, se empeñan en seguir bloqueando el proceso democrático que ya está en marcha, cubriendo así, con toda una cortina de vulneraciones de derechos ese pánico real que el Estado español tiene a la libre confrontación de ideas y proyectos políticos".
Sin embargo, ha asegurado que "no han logrado todo eso que querían conseguir", ya que "en Euskal Herria se ha dado paso a un nuevo tiempo político" y el proceso democrático "está en marcha". A pesar de ello, ha insistido en que el Estado español "se empecina y sigue enrocado en su inmovilismo".
Tras censurar la actual política penitenciaria "de excepción" que "ni siquiera tiene justificación en su propia legislación penitenciaria ordinaria", Barrena ha asegurado que solo están logrando "causar dolor y sufrimiento" y mantener "la vulneración de derechos humanos".