MADRID, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
El economista estadounidense Jeremy Rifkin, perteneciente al grupo de 14 expertos internacionales que asesoran el programa electoral del PSOE, criticó hoy la energía nuclear por sus enormes costes económicos, medioambientales y de seguridad.
"No creo que debamos dedicar nuestros recursos y esfuerzos a estas energías antiguas", dijo Rifkin durante el 'Foro de Calidad Ambiental y Progreso Social' organizado por el PSOE, la primera de cinco conferencias sectoriales previstas para dar voz a la sociedad civil en el programa electoral.
El economista estadounidense expuso cinco razones por las que, según dijo, incluso la mayor parte de las empresas del mundo "no creen que sea la energía del futuro". La primera es que, actualmente, hay en el mundo 409 centrales nucleares que generan tan sólo un 5 por ciento de la energía que se consume y, según la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), sólo con estas centrales hacia 2030 habrá problemas de abastecimiento de uranio.
En segundo lugar, explicó que la mera sustitución de estas centrales --que tienen un ciclo de vida limitado-- tendría un coste de 2.000 millones de dólares. Sin embargo, para que la energía nuclear tenga impacto en paliar el cambio climático, haría falta construir 2.400 centrales más, es decir, dos centrales cada 30 días en los próximos 60 años.
Pero además, prosiguió Rifkin, está el problema de la necesidad de almacenar los residuos nucleares, que nadie ha conseguido resolver, y el riesgo de que los materiales nucleares caigan en manos de terroristas. "¿Queremos uranio y plutonio circulando por todo el mundo en un momento en que el terrorismo es tan importante?" se preguntó.
Por último, alertó de que la energía nuclear es un gran consumidor de agua. Según dijo, Francia, que obtiene un 60 por ciento de su energía de centrales nucleares, destina un 40 por ciento de su consumo anual de agua a refrigerar sus reactores nucleares.
REUNION CON ZAPATERO
El experto estadounidense en economía del hidrógeno se había reunido previamente esta mañana con el presidente del Gobierno y candidato del PSOE en las próximas elecciones, José Luis Rodríguez Zapatero, pero no desveló el contenido de las conversaciones. "Él siempre me inspira", se limitó a decir.
Rifkin expresó sus opiniones sobre la energía nuclear respondiendo a preguntas de los asistentes al foro. El experto concentró su intervención inicial en promover un nuevo modelo energético, lo que llamó una "tercera revolución industrial".
Esta revolución que, a su juicio, España y la UE pueden liderar, se basará en energía de fuentes limpias y renovables "que todo el mundo puede tener en su propio patio, como el sol y el viento", que se almacenarán en pilas de hidrógeno y que será distribuida a través de "redes inteligentes" donde todos los usuarios puedan aportar y recibir energía.
"Si podemos elaborar nuestra propia información y compartirla a través de (las páginas web) Youtube o Wikipedia, ¿por qué no podemos fabricar nuestra propia energía y compartirla?", manifestó.
Además, opinó que España puede ser el país que inicie esta "tercera revolución industrial" gracias a la aprobación del nuevo Código Técnico de la Edificación que obliga a que los edificios nuevos o rehabilitados cuenten con paneles solares para generar energía.
Estos edificios consumirán un 40 por ciento menos de energía que los tradicionales, señaló por su parte la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, que lamentó que el Código no se hubiera aprobado "hace pocos años antes, del 'boom' inmobiliario".
Narbona clausuró el Foro junto a su colega de Agricultura, Elena Espinosa y ambas desgranaron las medidas aprobadas en esta legislatura en favor del desarrollo sostenible, la conservación de la diversidad y la eficiencia energética. Según Espinosa, la aplicación del Plan Nacional y el Plan de Choque de Regadíos ha permitido ahorrar 1.600 hectómetros cúbicos de agua al año.
INCENTIVAR EL MERCADO
Espinosa apostó por crear las condiciones de mercado necesarias para que medio ambiente y desarrollo rural supongan oportunidades empresariales. "Hay que crear condiciones nuevas, incentivar el mercado para fomentar el pensar en verde", dijo.
La titular de Medio Ambiente afirmó por su parte que "en España el cambio climático ha sido una verdad incómoda durante mucho tiempo" y que incluso en 1993, cuando ella era secretaria de Estado de Medio Ambiente, el Consejo de Ministros no logró aprobar el primer Plan Nacional para el Cambio Climático.
Después, criticó que entre 1997 y 2004, cuando gobernaba el PP, las emisiones de gases de efecto invernadero se incrementaron un 30 por ciento, no se traspuso la directiva europea de comercio de emisiones ni se elaboró el Plan Nacional de Asignación porque, según dijo, en "la cúpula" de este partido no se consideraba urgente el cambio climático.
Narbona defendió que combatir el cambio climático es "luchar contra todas las formas de igualdad a escala planetaria" porque los más afectados por sus efectos son los ciudadanos de países en vías de desarrollo.
El acto, que comenzó con un minuto de silencio por la muerte de los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero a manos de ETA, fue inaugurado por la secretaria de Medio Ambiente del PSOE, Soraya Rodríguez, que destacó que "sólo hay una fuerza política en España capaz de asumir el gran reto de un cambio hacia un modelo energético diferente".
El foro será clausurado oficialmente el lunes por Zapatero que hoy canceló su asistencia con motivo del funeral de Estado de Fernando Trapero.