El jurado declara culpable de homicidio al hombre acusado de matar a su 'camello' y cómplice a la mujer

Actualizado: martes, 23 enero 2007 21:13

La Fiscalía pide 15 años de prisión para Juan Carlos U.L. y seis años para Elisa R.G.

SANTANDER, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -

El jurado popular ha declarado hoy culpables de un delito de homicidio a los acusados de matar a su traficante de drogas, Rogelio Valdés, concretamente a Juan Carlos U.L. en calidad de autor y a Elisa R.G. como cómplice, al considerar que ésta colaboró en el crimen, aunque "no de forma necesaria".

Dado el veredicto presentado esta tarde ante la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria, el fiscal ha seguido manteniendo la petición de 15 años de prisión para Juan Carlos, dado su carácter de reincidente, mientras que para Elisa solicita seis años de prisión, estimando la atenuante de confesión. Además, ambos deberán de indemnizar conjuntamente a la familia de la víctima (tenía cuatro hijos) con 120.000 euros.

En el caso de Juan Carlos U.L., drogodependiente, los nueve miembros del jurado aprobaron por unanimidad que el 24 de junio de 2005, sobre las 6.30 horas, se desplazó en su vehículo a las inmediaciones de la gasolinera de El Empalme (Peñacastillo) para comprar droga a Rogelio Valdés, de raza gitana y de 38 años de edad.

Entonces, se inició "un forcejeo" entre ambos, resultando Juan Carlos con un arañazo de tres centímetros en la mano derecha. En el transcurso de la reyerta, y mientras la víctima estaba "en el asiento del conductor de su vehículo", el procesado esgrimió un cuchillo de "más de 20 centímetros de hoja", con el que, tal y como han considerado probado 8 miembros del jurado frente a uno, le asestó "dos puñaladas en el tórax, ocasionándole instantes después la muerte como consecuencia de una hemorragia aguda".

Hubo también unanimidad al considerar que Juan Carlos "era consciente de lo que estaba haciendo", pese a haber consumido drogas esa noche y que, por tanto, "quería causar la muerte de Rogelio".

Respecto a Elisa R.G., el jurado decidió por siete votos frente a dos que no está probado que le entregara el cuchillo a Juan Carlos, aunque sí consideran cierto, por unanimidad, que el último número que marcó Rogelio minutos antes de morir fue al teléfono de la acusada.

Tampoco quedó probado que acompañara al otro procesado hasta El Empalme la noche de autos, ni que permaneciese en un coche esperando a Juan Carlos para huir juntos, tal y como defendía el fiscal.

Sí en cambio quedó probado, por unanimidad, que una vez en el apartamento de la calle Alta, la mujer ayudó a Juan Carlos a "romper la punta del cuchillo, rociarle con Volvone y envolverle", deshaciéndose luego del arma por la ventana.

Es por ello que siete miembros del jurado frente a dos concluyeron que Elisa R.G. colaboró "aunque no de forma necesaria" en que Juan Carlos "causara la muerte a Rogelio Valdés".

También está probado que Elisa era drogadicta, aunque "era consciente del alcance de su conducta y de sus consecuencias"

Asimismo, el Jurado consideró que no es aplicable para ninguno de los dos acusados la suspensión de la pena de prisión, ni la posible solicitud de indulto, ni total ni parcial.

EL ACUSADO ROMPIÓ UNA PUERTA DE UNA PATADA

Tras conocer el veredicto del jurado, y una vez abandonada la Sala acompañado de agentes de la Policía Nacional, Juan Carlos U.L. rompió de una patada la parte de abajo de una puerta contigua a la Sala de Vistas, siendo controlado por los policías.

Juan Carlos U.L. fue condenado en 1991 a 12 años de cárcel por la muerte de Francisco J. Prellezo en la calle de Río de la Pila. Por su carácter de reincidente, el fiscal aseguró durante el juicio que "este señor, cuando sale de la cárcel se dedica a matar".

Su letrado pidió hoy una pena que no superara los 10 años de prisión, mientras que la defensa de Elisa abogó por una atenuante "muy cualificada" de cooperación con la Justicia, solicitando tres años como tope, quedando el caso visto para sentencia.